Y seguimos nuestro recorrido por las ciudades, y pueblos, de la provincia gaditana buscando a más damas de blanco. En esta ocasión nos detenemos en el hermoso lugar de Castellar de la Frontera, donde nos encontramos con la siguiente triste historia.
Esta damisela, según cuentan, deambula en las madrugadas por el entramado de calles de la población, buscando aquel que porte la llave de la casa donde abandonó su traje de novia y su vida, porque unos fascistas de la dictadura española se llevaron, al alba, a su prometido para darle el último paseo.
Unos corcheros; personas que trabajaban sacando el corcho de los alcornoques; cuentan que vieron cómo ella se lanzó al vacío desde la torre más elevada del castillo del pueblo. No obstante, cuando fueron a buscar su cuerpo jamás lo encontraron.
Esto alimentó la leyenda urbana que rodea a este trágico suceso. Se cuenta que su espectro vaga para retornar a su hogar por las calles de Castellar. Quizás buscando venganza, o tal vez ahogar sus penas con quien se cruce con ella.
Se dice que la ansiada llave de la casa de la desdichada pareja fue a parar a una inmobiliaria ajena al pueblo. Esta inmobiliaria logró convencer a casi la veintena de herederos para que accedieran a vender la casa del siglo XVII, ya semi derruida, a un matrimonio de rubicundos jubilados del centro de Europa por cerca de un cuarto de millón de euros. Una buena ganga para los tiempos que corren en la actualidad.
Hay que decir que, según se dice, esta historia ocurrió en el Castellar viejo; uno de los tres núcleos de lo que hoy en día se considera Castellar de la Frontera.
¿Podrá verse aún paseando a esta trágica novia por un pueblo irreconocible para lo que fue en su época?
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