Y luego dicen que los artistas viven bien, el que vive bien, digo yo Santiago, es Julio Iglesias, uno mismo de Jeré, con más moscas en la cabeza que un plato de higos, no vivirá bien en su vía, y más cuando ya no queremos aguantá las fátigas, te cuento lo del gato. Qué gato Curro, el otro día mismo estaba en un bar, en los Tres Reyes, tomando un cafelito con un amigo y viene un gato y empieza miau miau miau, el gato más pesao del mundo, y voy yo y le echo un cacho pan, pá ver al gato, todavía no había llegao al suelo cuando lo coge en el aire, no queda la cosa ahí, viene el gato otra vez y otro cacho de pan, lo mismo, cuando se lo come viene de nuevo pero esta vez le echo un trozo de chorizo que había en la mesa. Ahí te soltaste la melena. Escucha compare.., más rápido se lo comió el animal y ahí que veo que viene otra vez pá la mesa pero en vez de echarle chorizo le vuelvo a echar pan, y qué pasó con el gato, que no quería pan, que ya quería chorizo, y empezó miau miau miau, así tres horas y el pan en el suelo. Olería a chorizo. No había más chorizo, sólo pasaba que ya echaba de menos lo que nunca tuvo, así de fácil y así de sencillo, y el problema es que no sabía que él, como gato, será siempre un gato, pues igual pasa con el pobre. Qué apocalíptico. Ni apocalítico ni ná, eso de pasar fatigas dobles viene escrito en la sangre, va de generación en generación. Me lo pintas un poco... Te lo pinto como es, las cosas no cambian de la noche a la mañana, el que nace en cama de paja sólo sabe morir en cama de paja. Nunca escuché eso de la cama. Ni yo tampoco, con esto te digo que los de Jeré venimos pá dar más voltereras que un mono de feria. A mí me gusta eso de las volteretas y de no saber qué pasará. Hoy te gusta, hoy es tó muy bonito, pero mañana o pasao mañana, cuando el cuerpo no responda, ya me contarás. El tiempo dirá. Que tienes razón, el tiempo dirá y tó muy bonito y tó el mundo contento y tó el mundo muy artista, pero mañana mismo salgo a París pá la charla esa en el instituto español y como que no quiero. Pues siéntete afortunado. Que no tengo mijita ganas, vamos a ver si me explico, ahora una charla de cante muy arremetía por dos perras y pá qué..., pá que la mitá de la gente no me entienda, pá que lo que hable entre por una oreja y salga por otra. Como diría El Melli..., no te aguanto. Si eso lo sé, que no me aguantas. Únicamente te digo que la desidia y pensar que nada es imposible de cambiar trae únicamente la muerte. Tó es mentira Santiago, hasta la misma muerte es mentira, quién me dice a mí si estoy vivo o muerto, quién. Cuando te pones metafísico no hay quién te entienda Curro, Metaqué. Pesao Curro, pe-sa-o...