Imagen de una pasada campaña de Cáritas.
Imagen de una pasada campaña de Cáritas.

Cada vez me llama más la atención como determinados personajes no solo pueden llevar adelante sus obligaciones laborales, sino que además tengan el don de la ubicuidad y la superproducción y consigan estar permanentemente formados, estudiados, publicados, entrevistados, conferenciados, editados, versados, etcétera.

Pero, sobre todo, me sorprende la osadía por mezclar las doctrinas de cualquier tipo y, en este caso, económicas con las doctrinas religiosas y también las verdades empíricas con el pensamiento y la opción evangélica.

Y me refiero al doctor Carlos Rodríguez Braun, una de esas personas que a mí especialmente me caen bien por su ingenio y osadía. Tengo entendido que evolucionó de un pensamiento radical de Izquierdas en su Argentina natal, a la ultra liberalidad económica, de la cual es defensor y adalid. Supongo que, una vez estabilizada su economía, ya aquí en España. Su santo de cabecera es Adam Smith y su libro sagrado La Riqueza de las Naciones, el embrión de las teorías del Capitalismo.

Pues bien, el versátil doctor ha escrito un artículo en Libertad Digital, sobre las propuestas que tradicionalmente realiza Cáritas a los partidos, como aporte a sus programas, desde la concepción de la DSI y con el Visto Bueno de la Conferencia Episcopal, para atacar al Papa y a la Iglesia Latinoamericana además de resaltar o acusar la Incuestionable Podemización de Cáritas.

Las propuestas las denomina de ignorantes en el tema del coste económico, pero no se ha tomado la molestia de cuantificarlas (quizás no sepa o bien no se atreva) y las acusa de realizarse desde una visión amputada de la realidad, amparándose en las teorías del defensor del ultra liberalidad individualista de la economía, Henry Hazlitt y enemigo el pensamiento de John Maynard Keynes (el corrector del capitalismo salvaje de mitad del siglo pasado y en cierto aspecto padres de la teorías económicas socialdemócratas)

También acusa a Cáritas de facilitar el efecto llamada de los menores migrantes y para tapar esos comentarios en el fondo xenófobos (él que llego a España como migrante, huyendo de la miseria y la amenaza de los militares de la Argentina de los generales golpistas), ya en pleno éxtasis ultraliberal, acusa  Cáritas de inconsciente por reclamar vivienda para las personas que no tienen y derecho a tener suministro de energía para las personas que no pueden costearla.

En fin, no merece la pena seguir sorprendiéndome de las afirmaciones y comentarios de un desconocedor de la Doctrina Social de la Iglesia y el Evangelio, porque don Carlos desconoce que el compromiso social de la Iglesia no es algo secundario u opcional, sino algo que es consustancial y pertenece a su propia naturaleza y misión (y no a las opiniones de este Papa, compatriota suyo). Y que Cáritas trabaja por la Justicia y la denuncia las estructuras injusta y por eso, la caridad no debe ser solo paliativa, sino que debe ser preventiva, curativa y propositiva.

También ha salido estos días en Infolibre (de tendencia izquierdista, podría denominarla) otro artículo por la misma razón, que sirve para mostrar a la Iglesia desde un punto de vista critico como colaboradores necesarios del sistema capitalista actual. Ahora estamos en el otro extremo.

Pues verán ustedes cuando presentemos el VIII Informe FOESSA, la que nos va caer, informe que pondrá de manifiesto la desigualdad en nuestro país y en el que de manera voluntaria se comprometen más de 100 catedráticos y profesores de todas las universidades españolas.

Francisco Domouso Martínez es director de Cáritas en la Diócesis de Asidonia-Jerez y secretario general de Cáritas Andalucía.

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