No hubo reto en TikTok ni en Instagram, como se especuló, fue más simple: un encuentro a la desesperada tras conocer hace meses a una chica en redes sociales. Con solo 13 años, Darek Catalán Pérez, natural de Puerto Real, había insistido a sus padres en que lo llevaran a Madrid, y estos no llegaron nunca a decirle que no, solo que lo harían cuando pasara la pandemia.
En cambio, este pasado domingo, aprovechando que habían bajado a comprar el pan, al filo de las dos de la tarde, Derek se marchó de casa y puso rumbo a la capital de España. Nadie se explicaba todavía cómo el menor pudo saltarse el confinamiento municipal, provincial, autonómico y alcanzar Madrid sin ningún problema en plena pandemia. El susto para los padres, que creían que se había quedado jugando a la consola, ha sido terrible. Más de 24 horas de desesperación.
La Policía Nacional, que no descarta todavía que haya "otros hechos" detrás de la desaparición del joven de Puerto Real, logró geolocalizar su dispositivo móvil en una zona próxima al municipio madrileño de Majadahonda, en la zona Norte, y así logró dar con el paradero del menor. Según la familia ha declarado a Canal Sur, el teléfono móvil estaba "operativo a ratos", aunque no contestaba las llamadas y cada vez que alguien intentaba contactar con él acababa bloqueado.
Familiares y amigos del menor desaparecido habían iniciado una batida por toda la zona para intentar encontrarle. Lo que sí parece que se produjo fue una comunicación desde el móvil con el grupo de amigos del instituto. La familia señaló que no creía que la desaparición tuviera que ver con un supuesto reto sobre desaparecer durante 48 horas, aunque en algunos momentos no se descartó ninguna hipótesis.
A última hora de la noche de este pasado lunes Darek se encontraba bien, "asustado" y bajo la custodia de la policía madrileña. Su familia salía al encuentro viajando desde Puerto Real hacia la capital de España para traerlo de vuelta a casa.
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