La sequía asfixia a los ganaderos. Llevan más de un año batallando para poder subsistir tras una crisis en el transporte y la guerra de Ucrania. A los obstáculos se suma la falta de precipitaciones que mantienen al sector en vilo. Mirando al cielo. Así se levantan las familias productoras que intentan salir adelante en una tierra seca donde hay dificultades para los cuidados básicos del ganado.
Sin lluvias, no hay alimento. Algunos ganaderos han llegado a tener que comprar cubas de agua para dar de beber a sus animales. En este contexto, las redes sociales se han llenado de vídeos del campo gaditano.
Pastos inexistentes y vacas a paso ligero. “Estas vacas corren despavoridas en busca de alimento. La falta de lluvias deja sin hierba y sin pastos a los animales. Y más costes en piensos para el ganadero”. Así alertaban en X, antigua Twitter.
La situación es “extrema” como ya han anunciado la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) en distintas ocasiones. Sin embargo, desde el campo gaditano consideran que estos vídeos tienden a malinterpretarse.
“Simplemente, es un ganadero que las estará llamando para echarles de comer, como se echa un pienso racionado, las vacas van a intentar llegar las primeras para comer con más tranquilidad”, comenta Antonio Visglerio, ganadero extensivo de Alcalá de Los Gazules, de la cooperativa Bovinos del Sur, integrada en el grupo alimentario Dcoop, compuesta por 120 ganaderos que suman unas 12.000 vacas nodrizas, "los ganaderos dejan de comer ellos antes de que lo hagan sus vacas", dice.
El ganadero, que realiza su actividad en pleno parque natural de Los Alcornocales, explica que “el año ha sido muy malo y los ganaderos están teniendo que suplementar más de lo habitual y a unos costes de alimentación muy elevados”.
Según comparte con lavozdelsur.es, “esto, evidentemente, está afectando a la rentabilidad de las explotaciones y haciendo que el censo, que ya venía bajando en los últimos años, descienda con más fuerza, pero estos videos solo perjudican al sector”.
Estas sensaciones son compartidas por el ganadero Manuel Troya, malagueño criado en El Puerto, que aplica un sistema de producción novedoso basado en el manejo holístico en su finca de San José del Valle. Su sistema le permite asegurar el pasto al ganado en época de escasez. No por ello deja de ser consciente de que “el verano ha sido muy duro” para el sector.
“La suplementación es una práctica habitual en esta zona. Las vacas son animales de hábitos. Al darles de comer a diario están esperando ese momento y por eso corren. El pienso está muy compensado nutricionalmente y para ellas es como una golosina. Nosotros haríamos igual cuando sale el jamón ibérico de la cocina”, opina.
Las asociaciones agrarias como COAG apuntan que una manera de soportar el temporal es mediante ayudas específicas y la eliminación de trabas burocráticas.
Un total de 9.097 ganaderos andaluces recibirán en octubre 59.156.868 euros por la ayuda extraordinaria de la sequía, según ha anunciado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España. Esta ayuda pretende compensar la situación debida a la sequía y a las condiciones derivadas del conflicto bélico en Ucrania.
“Cuantificar si son suficientes no es fácil, pero cualquier ayuda es bienvenida”, comenta Antonio, que señala que “el problema es que las necesitamos ahora, que es cuando estamos gastando más dinero en suplementación”.
Según sostiene, “el ganado no se alimenta del campo desde hace muchos meses”.
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