Margarita Martín Ortiz, presidenta del Ateneo Siglo XXI de Jerez.

Margarita Martín Ortiz

Presidenta del Ateneo Siglo XXI de Jerez

Convivencia vecinal en el barrio de Santiago de Jerez.

El barrio que fuimos

Donde pongo la vida

Las asociaciones vecinales –ese movimiento que cobró tanta fuerza en los años ochenta y noventa– ya no tienen relevo, no parece haber nadie dispuesto a ocuparse de lo común

Turistas llegando al Aeropuerto de Jerez.

El mundo nos espera

Donde pongo la vida

Estoy convencida de que la cultura es un pilar fundamental para el desarrollo de los individuos y de los pueblos, un motor que transforma las sociedades y mejora la vida de las personas

Un hombre sacando una foto con su móvil.

El fin del camino

Donde pongo la vida

Es la sensación de ser muñecos y muñecas cuyos hilos mueven manos desconocidas, temidas, mezquinas, ambiciosas, interesadas, arrogantes, despiadadas…

Una persona pescando en Puerto Sherry.

La libertad de la tarde

Donde pongo la vida

Vivimos en la irrealidad, en artefactos gobernados por entes desconocidos, en relaciones virtuales, en imágenes confeccionadas a medida

Una joven descansa en un parque en Jaén.

El tiempo

Donde pongo la vida

No queremos darnos cuenta de que la vida discurre a su antojo y ni el tiempo se detiene, ni los minutos se alargan

Personas caminando por una calle.

No te fíes

Donde pongo la vida

Hemos perdido el espíritu de comunidad y vamos por la vida tachando imaginariamente todo lo que nos genera desconfianza

Agujero existencial, por Margarita Martín.

El agujero existencial

Donde pongo la vida

Somos barro, materia dúctil y maleable; capaz de hacer caer a un gigante y de llevar agua a una persona sedienta

Personajes de animación en la Feria del Libro en Jerez.

Sobre las siete colinas

Donde pongo la vida

Seguimos confiando en que nuestra historia acabará bien, que los errores se corregirán, que seguirá habiendo cuatro estaciones, tres Reyes Magos y un Ratón Pérez

Varias personas tejiendo en público en Jerez.

El hilo de la vida

Donde pongo la vida

Pienso que tejer y escribir son formas de un diálogo interior; ese "estoy hablando sola" de nuestras abuelas, un discurso sin público que les permitía dar marcha atrás y corregirse

María Pombo, con una estantería con libros a su espalda.

Tabla de salvación

Donde pongo la vida

Puede que la literatura no nos salve, ni la lectura nos haga mejores, pero suponen un acto de confianza en la palabra, nos ayudan a empatizar con otros seres humanos