El suceso tiene una carga de surrealismo que apenas se aprecia porque podría haber terminado en una verdadera tragedia. Un hombre de algo más de cincuenta años, acompañado de su hijo, pidió esta tarde, poco después de las 19.00 horas, unas cervezas y un par de montaditos.
Cuando el camarero de la barra de la cafetería Las Postas se los sirve, el hombre pregunta si tienen mayonesa, a lo que el camarero le responde que no.
Ya en la terraza, el hombre vuelve a preguntarle lo mismo a otra camarera, que le responde lo mismo, que no tienen, a lo que el cliente se levanta, va a la gasolinera de enfrente, la más al sur de Los Palacios y Villafranca, apenas distante unos metros de la cafetería en cuestión, y vuelve con una botella de litro y medio de gasolina que, inmediatamente, rocía sobre la barra y prende fuego. La explosión que provoca es de película.
Según han podido saber los agentes de la Policía Local de Los Palacios, que acudieron inmediatamente a la llamada de socorro desde la cafetería, el pirómano es natural de Córdoba y está trabajando circunstancialmente en algún polígono de este municipio del Bajo Guadalquivir.
“Entró tan normal y no hubo siquiera discusión, es que es increíble”, dice el dueño de la cafetería, José Antonio Caballero, más conocido como el Liebre, apodo adoptado por el establecimiento más famoso de los que regenta en Los Palacios y Villafranca. El Liebre, alertado por lo sucedido, llegó desde Chipiona, pues también allí regenta otros establecimientos hosteleros como el chiringuito Tulum.
Según su testimonio, otra camarera de la media docena que trabajaba esta tarde en Las Postas siguió al cliente que había prendido fuego hasta la plaza de Andalucía, apenas cien metros más allá de la cafetería, donde fue detenido por agentes de la Benemérita y de la Policía Local y conducido, esposado, al centro de salud Nuestra Señora de las Nieves para ser curado de las quemaduras, porque se da la circunstancia de que solo él ha sufrido daños de diversa consideración.
Otros clientes, según algunos de los testigos, podrían haberse visto gravemente afectados, como un señor mayor que pasa junto a las llamas y hasta un niño pequeño que había estado en el lugar apenas unos segundos antes de que estallara el fuego.
Daños reparables
Caballero asegura que mañana intentarán abrir a primera hora, para lo que trabajan a destajo en la limpieza del local. Las Postas es sin duda una de las cafeterías más habitualmente concurridas de Los Palacios y Villafranca, y fue adquirida por el grupo Liebre hace ahora año y medio, aunque llevaba dos décadas de continuado éxito en manos de dueños anteriores, también palaciegos.
Según Caballero, los daños provocados entre el incendio en sí y lo que se ha dejado de ganar en una tarde como la de hoy pueden superar los 7.000 euros, aunque “lo más importante es que ninguno de nosotros ni nuestros clientes ha sufrido daños importantes”. Solo el camarero que estaba en la barra se ha quemado una mano, pero de forma leve. “Subimos este vídeo para que este tipo de personas sean castigadas y estén fuera de nuestra sociedad de manera inmediata y que todo el peso de la ley caiga sobre ellas”, ha publicado Caballero en sus redes sociales a continuación.
