La autoridad laboral ya ha fijado los servicios mínimos que se tendrían que prestar en caso de que la misma se produjese: 60% en el centro y 40% en la periferia.
Aunque todavía la huelga de basura está en el aire, la autoridad laboral ya ha fijado los servicios mínimos que se tendrían que prestar en caso de que la misma se produjese. En concreto se contempla una prestación del servicio del 60% en el centro, de un 40% en la periferia y de un 100% en colegios y centros sanitarios. Así lo ha dado a conocer la alcaldesa, Mamen Sánchez, durante el transcurso de un desayuno informativo con la prensa en la sede del PSOE de Jerez, reconociendo además que "hay que mejorar claramente" el servicio de limpieza y que la labor de su gobierno es la de "mediación" sin que eso eso suponga injerencias en la negociación de los trabajadores con la empresa Urbaser.
El teniente de alcaldesa de Medio Ambiente, José Antonio Díaz, considera que la ciudad no puede "sufrir" una nueva huelga como la última de final de 2012 –que duró 21 días, durante los que se acumularon más de 3.000 toneladas de basura– porque perjudica de modo "grave" a Jerez y su actividad económica, puesto que el inicio de la huelga, el 3 de enero, coincidiría con los últimos días de la campaña navideña, con todo lo que eso supone para comerciantes y hosteleros.
Los trabajadores manifestaron su intención de realizar un parón indefinido en el servicio a principios de mes y desde entonces, tanto Ayuntamiento como concesionaria se han reunido en aras de buscar "una solución dialogada para llegar a buen puerto", sostenía días atrás José Antonio Díaz tras la última cita entre Consistorio y Urbaser. Así, la empresa se comprometió a "convocar a los trabajadores a una mesa de negociación" este mismo lunes. La plantilla pretende recuperar las condiciones laborales que tenían en 2011 y que se les compense el recorte de 4,5 millones de euros que ejecutó el PP y que supuso una bajada del 10% del sueldo de los trabajadores, también de los pluses y un 20% menos de presupuesto para el servicio.
Con el Presupuesto de 2016 todavía por concluir –hace poco se aprobó el de 2015, que es más bien una memoria económica del año–, está por ver qué partida se destina a la limpieza viaria en unas cuentas que deben recortar un 5% en gasto de bienes y servicios en virtud del nuevo Plan de Ajuste que debe contener. El servicio cuesta unos 21 millones de euros al año a las arcas del Ayuntamiento, 14 de los cuales se dedican a pagar los sueldos de los 400 trabajadores que componen la plantilla.
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