Un año y dos meses han pasado desde que El Chicharrón de Bronce se asentó en el barrio de Santiago de Jerez. Fue a finales de 2024 cuando Diego Monje, descendiente de la saga flamenca de los Monje, abrió este negocio que no para de alegrar paladares. Desde la calle Moraíto Chico, el chicharronero, con años de experiencia en hostelería, mantiene viva la cocina gitana.
“Estamos en Navidad, pero el chicharrón se puede comer en cualquier época del año. No es un producto estacional”, comenta Diego. La tapa se puede degustar caliente en otoño e invierno, al medio día, cuando el frío aprieta; como en primavera o verano, atemperada o frío crujiente, en una noche calurosa. “También se presta a las barbacoas o a los eventos familiares”, dice el jerezano que quiere romper con la temporalidad del alimento.
Los chicharrones que elabora con mimo y templanza se adaptan a todos los climas. Disfrutar de sus bocados es un placer apto para todos los días del año sin excepción. “La gente del barrio se ha volcado, la mejor publicidad la han dado ellos, han aceptado el producto muy bien”, dice con una sonrisa de oreja a oreja.
Con motivo del nombramiento de Jerez como Capital Española de la Gastronomía 2026, tiene previsto añadir una nueva propuesta. Un chicharrón con toque “picante” que bautizará como Tío Curro. “Mi abuelo es conocido en la familia así y queremos darle ese pequeño homenaje”, explica. El negocio comenzará el nuevo año comercializando esta novedad bajo encargo, sin dejar de elaborar la estrella de la casa que sigue brillando en el barrio.
Dirección
Calle Moraíto Chico, 13, Jerez
Horarios
De martes a sábado de 9.30 a 14.30 horas.
Contacto
684 71 44 39