Con objeto de impedir los desplazamientos entre localidades de la provincia de Cádiz, varios ayuntamientos están restringiendo los accesos a sus núcleos urbanos.Uno de ellos es el consistorio de Setenil de las Bodegas, que lo ha anunciado esta misma mañana tras bloquear varios de sus caminos públicos con barricadas de arena. "Todos tenemos que colaborar, hay que llamar a la Guardia Civil en caso de movimientos extraños y conductas que pongan en peligro la seguridad del conjunto de la ciudadanía" ha afirmado a través de la red social Facebook su alcalde, Rafael Vargas Villalón. Mientras que varios accesos están bloqueados con vallas, el consistorio ha vertido centenares de kilos de tierra en los caminos de Pago Dulce, del Arroyo de los Molinos y del Higuerón.
Además, el Ayuntamiento de Setenil de las Bodegas ha solicitado a todos los vecinos que permanezcan en sus casas y que avisen a las Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado con objeto de poner en conocimiento de ellos aquellos incumplimientos de ley y normas establecidas por excepcional situación del estado de alarma. Un llamamiento que han firmado bajo el hashtag #Setenilunido.
Barbate blinda sus accesos desde este viernes.
"Pedimos la colaboración de todos en estos momentos tan complicados", suscriben. Así, el municipio, que fue catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España este pasado año, se suma a otros pueblos blindados frente al coronavirus, como Algodonales, Zahara de la Sierra o Barbate, que lo ha hecho público esta misma tarde. De hecho, Algodonales es una de las localidades que ya cuentan con positivos entre sus vecinos, al igual que Ubrique, con dos casos confirmados este miércoles.
Zahara de la Sierra, bloqueada con vallas.
Fue el pasado martes cuando Ángel Acuña, alcalde de Algodonales, publicó un decreto en el que cerraba los dos accesos al municipio, al tiempo que establecía controles tanto para el acceso como para la salida de la localidad. Una iniciativa que llevó a cabo un día antes Santiago Galván, regidor de Zahara de la Sierra, quien también bloqueó tres de los cuatro accesos al núcleo urbano. Estas medidas, que buscan frenar el contagio del coronavirus entre los municipios de la provincia, se producen inmediatamente después del dramático episodio vivido en Alcalá del Valle, donde una residencia de mayores, con 58 positivos y varios fallecidos, tuvo que ser desalojada por la Guardia Civil.
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