El camarero, para evitar que la arena entrara en el vaso del rey, colocó una loncha de jamón a modo de tapaderaJosé Manuel Córdoba, actual propietario del Ventorrillo, dispone en la actualidad de un folleto en su restaurante que cuenta la anécdota desde que este historiador le facilitara hace unos años unos escritos que respaldaban la historia. Su familia lleva regentando el restaurante desde hace 54 años, él lo hace desde los 90 aproximadamente. El Chato empezó a funcionar en 1780 para alivio de caminantes, en el espigón polvoriento que unía Cádiz con la Isla. "Se dice que la venta fue fundada por autorización de Conde O´Reilly, por Chano García, a quien apodaban 'El Chato' por causa de su gran nariz”. La segunda teoría se traslada hasta la trastienda de unos chicucos que regentaban un ultramarinos en la localidad gaditana. Hubo un tiempo en que, en Cádiz, todos los comercios de alimentación estuvieron regentados por cántabros, o montañeses, como se les sigue denominando. Hubo más de setecientos almacenes de ultramarinos sólo en la capital y más del noventa por ciento de esos negocios estuvieron atendidos por encargados y dependientes procedentes de Cantabria. Normalmente estos almaceneros vivían en la trastienda del establecimiento. Un día un cliente pidió al chicuco que le dejara probar aquello que cocinaba en la parte trasera de la tienda —que era su casa—, ya que olía muy bien. Se corrió la voz de que lo que cocinaba estaba realmente bueno, y cada vez fueron más los clientes que querían probarlo.
Un día un cliente pidió al chicuco que le dejara probar aquello que cocinaba en la parte trasera de la tienda
Sea como fuere, las brújulas señalan a Cádiz. La tapa es tan mítica en nuestra cocina que, tal como señala el I Estudio Nacional de la Tapa realizado por la Federación Española de Hostelería (FEHR), más del 58,5% de los establecimientos hosteleros españoles ofrecen una tapa gratuita como acompañamiento a la bebida, siendo la más solicitada el pincho de tortilla, con su correspondiente acompañamiento de pan. Durante estos días, la provincia ha acogido el A, B, C de las Tapas Gaditanas, un evento gastronómico organizado por Horeca para conmemorar este día. Un total de 47 establecimientos ofrecen tapas con productos señeros de la gastronomía gaditana: A de Atún, B de Boquerones y C de Caballa; contando con la participación de bares de Cádiz, El Puerto de Santa María, Chiclana, Rota y Puerto Real. Este jueves es el último día para poder disfrutar de esta oferta.
La provincia tiene una gran oferta tanto de lugares donde disfrutar de las tapas como de ferias y rutas que se van sucediendo a lo largo del año. El portal Gastroranking hace una curiosa selección de restaurantes de tapeo que no puedes perderte este verano. Además, en la capital volverá a celebrarse una nueva edición de la Ruta del Tapeo, con la participación de alrededor de 40 establecimientos que ofrecerán lo mejor de la gastronomía gaditana, entre el 15 de julio y 15 de agosto. Así que deja aparcada la operación bikini, porque cualquier día puede ser el día de la tapa.
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