La Feria del Caracol de Bornos celebrará su octava edición del 9 al 11 de mayo. Un año más, esta localidad de la Sierra de Cádiz, se consolida como epicentro de esta delicia. Durante tres días, los visitantes podrán degustar una amplia variedad de recetas tradicionales e innovadoras, con los caracoles, las cabrillas y los burgaos como protagonistas. La cita gastronómica contará con el apoyo de la Diputación Provincial de Cádiz, que un año más respalda al Ayuntamiento en la organización del evento.
El vicepresidente primero de la Diputación, Juancho Ortiz, ha participado en la presentación de la feria junto al alcalde de Bornos, Hugo Palomares, y la concejala de Turismo, María José Andrades. Ortiz ha destacado a Bornos como la “capital del caracol” durante un fin de semana en el que se repartirán más de 5.000 kilos de este producto. “No solo enriquece nuestra cultura culinaria, sino que impulsa el turismo, llena alojamientos, dinamiza la hostelería local y crea empleo. Además, la Feria del Caracol demuestra cómo una tradición sencilla puede convertirse en motor económico”, afirmó el representante provincial.
Actividades para todos los públicos
El programa de la Feria del Caracol contará con la degustación de caracoles y cabrillas en diversas recetas, enmarcadas en el Castillo Palacio de los Ribera, un entorno único que permitirá a los asistentes disfrutar también de sus jardines renacentistas. Este año se incrementará el número de establecimientos que ofrecerán sus propuestas culinarias desde el mediodía del viernes hasta el domingo.
La programación se completa con conciertos, animaciones, servicio de ludoteca, sala de lactancia, juegos infantiles, rutas guiadas, carreras de caracoles y otras actividades pensadas para el disfrute de todos los públicos. Además, como en anteriores ediciones, se podrán degustar las reconocidas chacinas de Bornos, un complemento perfecto para esta experiencia gastronómica.
La Feria del Caracol de Bornos vuelve a situar a este municipio de la Sierra de Cádiz en el mapa gastronómico, reafirmando su apuesta por un producto que, año tras año, sigue atrayendo a miles de visitantes. Por su parte, el alcalde de Bornos subrayó el valor gastronómico de los caracoles para el municipio, destacando que esta tradición ha posicionado a la localidad como un referente en la provincia y más allá. Además, Palomares explicó que la temporada de caracoles se ha extendido en los últimos años, abarcando prácticamente desde el mes de abril hasta finales de julio, lo cual supone un activo importante para la economía local.