El entorno turístico Entrecatedrales, en el Campo del Sur de Cádiz, se somete a un plan de recuperación que lo saque de su estado de "abandono" crónico.
Este espacio, de teórica vocación cultural, fue inaugurado hace nueve años y es obra del prestigioso Alberto Campo Baeza (Premio Nacional de Arquitectura).
Casi desde su inauguración, en 2015, permanece en un total estado de abandono y condenado a los estragos del "vandalismo, la suciedad" y la corrosión marítima, según admitía este viernes el alcalde de Cádiz, Bruno García.
Los trabajos tienen un presupuesto de 24.505 euros y un plazo de ejecución de 33 días hábiles, una vez que se adjudique la obra.
En el informe técnico comentado este viernes como justificación se hace mención "al escaso mantenimiento y el vandalismo existente en la zona", así como a la "entrada de agua de manera torrencial" o a la proliferación de "vegetación sin control".
Como suma de los elementos, el emplazamiento muestra un estado deplorable que obliga a los operarios a realizar las labores de limpieza previas con mascarillas profesionales.
Entrecatedrales es una estructura metálica y originariamente blanca dividida en dos niveles. El superior, elevado, ofrece un mirador al océano Atlántico. El inferior estaba consagrado inicialmente a yacimiento arqueológico por contener parte de los restos de la Casa del Obispo.
En sus primeros años de existencia, la empresa Monumentos Alavista se hizo cargo del emplazamiento pero las acusaciones cruzadas entre esta concesionaria y el Ayuntamiento (que se achacaban mutuamente desperfectos de construcción, falta de mantenimiento y filtraciones de agua) desembocó en un rescate municipal.
El alcalde de Cádiz asegura que el Ayuntamiento de Cádiz amplía ahora un nuevo plan de rehabilitación y adecentamiento, iniciado el pasado mes de marzo, ante la posibilidad, incluso, de la "destrucción de las estructuras".
"Se va a proceder a la limpieza de la basura y de todos los elementos desprendidos, la eliminación de los arbustos y plantas, la colocación de una manta geotextil que recubrirá los elementos a proteger y la aportación de una capa de árido".
Hace tres semanas comenzaron el resto de las labores: pintura del espacio exterior y arreglo de desperfectos en la solería, eliminación del óxido en la estructura y sustitución de los cristales rotos de la zona baja.
Bruno García concluye su anuncio con la afirmación de que se trata de "un espacio público que hay que cuidar" aunque haya permanecido casi diez años en el descuido absoluto. Este mirador con yacimiento, y viceversa, está ubicado, además, en un punto clave de los recorridos turísticos del casco antiguo.
Su ubicación lo convierte en puerta de entrada o salida del barrio medieval del Pópulo y se encuentra a pocos pasos de la Catedral, la iglesia de Santa Cruz o uno de los paseos más fotografiados de Cádiz, el Campo del Sur.
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