Lanzó un mensaje, como si fuera el trailer de una película, este viernes tras la junta de gobierno local. Bruno García de León atraviesa la simbólica línea que separa la primera mitad del mandato de la última, los dos años iniciales de los definitivos antes de las urnas.
A efectos políticos, el alcalde de Cádiz le da la vuelta al jamón, empieza la segunda parte y nunca se sabe si los votantes, allá por mayo de 2027, decidirán que haya prórroga, pena máxima o pitarán el final del partido.
El tiempo se agota, ya se le ve el final y los proyectos que eran convenientes para presumir de gestión evidente pasan a ser urgentes e imprescindibles para no llegar con las manos vacías, sin una sola cinta de inauguración cortada.
La posible y leve mejora, aún sin aparecer a ojos de los ciudadanos, de los servicios municipales básicos -la limpieza, transporte urbano y tráfico- sería trofeo insuficiente como resumen del mandato 2023-2027. Las obras suponen la única ocasión de brillar.
En sede municipal, el 18 de julio, el regidor declaraba con cierta rotundidad que ha llegado el momento de "pasar de los papeles al ladrillo", de los proyectos y los anuncios en los medios a "los andamios".
Conocedor del desánimo ciudadano que transmite la lentitud en el avance de todos los grandes proyectos urbanísticos de la ciudad, repitió esa palabra tan fabril e industrial hasta en cinco ocasiones.
"Este año habrá andamios, veremos muchos andamios, en Valcárcel y en la Ciudad de la Justicia. En 2026, en El Portillo. Los gaditanos van a ver andamios".
Entre los proyectos, con varias administraciones implicadas, que siguen como estaban en 2020, en 2015 y en 2010 aparecen -además de los tres mencionados- la plaza de Sevilla, el entorno de la estación Renfe, el de La Caleta o la verja del muelle.
Comprar si es que venden
El mismo espíritu de aceleración y lucha contra el almanaque parece estar detrás del anuncio realizado este martes por el Ayuntamiento de Cádiz.
De forma sorprendente, el alcalde asegura que la institución pedirá un crédito para comprar el suelo del futuro e hipotético nuevo hospital, el del solar de la antigua factoría de Construcciones Aeronáuticas (CASA).
Acompañado de sus máximos colaboradores, y posibles sucesores, los concejales de Urbanismo, José Manuel Cossi, y de Hacienda, Maite González, García anunciaba que el equipo de gobierno va a llevar al pleno del 31 del julio dos modificaciones de créditos.
Ese trámite, adelanta, garantizaría la financiación del pabellón Portillo y, "lo que es más importante", la posible compra del solar de CASA, el que se va a destinar en el futuro al hospital, donde además, también se podrían construir 200 viviendas.
La primera de las dos modificaciones de crédito irá a la amortización casi completa de un préstamo que se formalizó en diciembre de 2024.
La Zona Franca recibe la posible oferta con extrañeza, lamenta "enterarse por los medios" y la considera un posible obstáculo
Permitirá, según el anuncio, devolver 25,5 millones de 27 solicitados para financiar el parque del cementerio, avenida de Astilleros y la rehabilitación de las Puertas de Tierra.
La segunda modificación "permitirá generar un crédito por valor de 19,7 millones de euros, con 4,62 para la financiación del Portillo, 1,4 millones para la demolición de la lonja de frutas y promoción de vivienda pública y 1,7 millones para la expropiación o adquisición de fincas".
Al final de este desglose llegaba el hipotético gran anuncio: "12,5 millones de euros para que el Ayuntamiento de Cádiz pueda tener la posibilidad de hacerse con el solar de CASA, propiedad de la Zona Franca".
Suelo para el hospital y 200 viviendas de añadido
Una vez obtenido el suelo, el plan es "ceder la parcela de mayor tamaño a la Junta de Andalucía para la construcción del futuro hospital y quedarse con otra para la construcción de vivienda". El alcalde y su equipo adelantan que serían 200 pisos.
"Ponemos esta solución encima de la mesa. No obstante, si hubiera otra, nos comprometemos a que esos 12,5 millones de euros serían para generar nuevas viviendas en cualquier otro punto de la ciudad", añade el alcalde.
Para adelantarse a las posibles críticas por un endeudamiento municipal excesivo, Bruno García indicaba que la deuda municipal total tras esta operación financiera será de 77,5 millones de euros, "unos 20 menos que la recibida del anterior equipo de gobierno en 2023".
Al enemigo, ni suelo
El Consorcio de la Zona Franca -adscrito al Ministerio de Hacienda, es decir, al Gobierno- tiene poco interés en facilitar un supuesto triunfo político a un alcalde del Partido Popular antes de las elecciones municipales de 2027.
A falta de un pronunciamiento formal, tras "enterarse por los medios pese a las conversaciones que mantienen de forma regular ambas administraciones", la entidad que preside Fran González deja caer que la solicitud y obtención de un crédito (12,5 millones de euros) para la compra del suelo sería "un nuevo obstáculo" y ralentizaría todo el proceso.
Resulta chocante que pueda ralentizarse un proyecto anunciado por la presidencia socialista de la Junta de Andalucía en verano de 2005 y que 20 años después aún no tiene siquiera el suelo disponible para diseñar y presupuestar un proyecto concreto.
Con el PSOE local comprometido por esta negociación con Zona Franca y por su pasado como impulsor de un proyecto que no será realidad un cuarto de siglo después de ser anunciado, la oposición se pronuncia a través de Adelante Izquierda Gaditana.
"Despropósito", "desfachatez" y "escándalo" son los calificativos que David de la Cruz (Adelante) dedica a la operación financiera
"Nos parece absolutamente escandalosa la decisión que ha tomado Bruno García de comprar el suelo del hospital regional a costa de volver a endeudar al Ayuntamiento de Cádiz, con la intención de salvar los muebles, una vez más, al Partido Popular y a la Junta de Andalucía".
"¿Por qué los gaditanos tenemos que pagar de nuestro bolsillo una operación que debe ejecutar de principio a fin la Junta de Andalucía?", se pregunta el portavoz David de la Cruz.
El concejal califica como un "auténtico despropósito que seamos exclusivamente los gaditanos quienes, por decisión de Bruno García, tengamos que pagar esta operación. No será un centro exclusivo para la ciudad, sino un hospital de referencia para toda la Bahía".
De la Cruz asegura que el anuncio es más sangrante porque la Junta "ha obtenido muchos millones de euros de Cádiz vendiendo suelo y espacios de los gaditanos. Es una desfachatez que esas plusvalías no vayan destinadas al futuro hospital regional".
La opción de incluir la construcción de 200 viviendas en la parcela, junto al posible hospital, tampoco satisface a la oposición: "Así, el PP facilita una vez más a las constructoras que puedan pegar su pelotazo urbanístico en nuestra ciudad".
