La Asociación Tu abandono me puede matar (TAMPM) ha denunciado una nueva agresión a una empleada pública en el Centro Penitenciario Sevilla-2, en Morón de la Frontera. Los hechos tuvieron lugar este pasado viernes en el módulo 1.
Los funcionarios destinados en el mismo detectaron un comportamiento extraño en un interno, sospechando que pudiera portar algún objeto prohibido por lo que decidieron a proceder a un cacheo rutinario. En ese momento, el recluso se revolvió empezando a golpear en la cara y a dar patadas a la funcionaria, empujándola contra la pared.
Afortunadamente, relatan, "su compañero pudo hacer uso del único medio de defensa del que disponen los funcionarios de prisiones para atajar este tipo de incidentes (cuando funciona), el walkie talkie, y gracias a la pronta llegada de otros funcionarios se pudo restablecer la situación". La empleada agredida requirió asistencia médica.
En este módulo trabajan dos funcionarios para más de 60 internos considerados de gran peligrosidad y nula adaptación al medio, e incluso en ocasiones, como en el caso del que protagonizó los actos de este pasado viernes, con problemas psiquiátricos.
Una vez más la asociación denuncia la "escasez tanto de medios materiales como de personal en todas las prisiones del Estado para poder resolver situaciones como la acontecida, sin tener que poner en peligro su integridad física. Igualmente también reiteramos la necesidad de que los funcionarios tengan la condición de autoridad para evitar que estos hechos queden prácticamente impunes".
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