La Fiscalía Provincial de Madrid ha presentado un escrito de acusación contra el poeta Camilo de Ory, de 49 años, por un delito contra la integridad moral por los mensajes "burlescos" y "humillantes" emitidos en la red social Twitter durante el rescate del niño de dos años, Julen Rosellón, que murió tras caer al interior de un pozo de prospección en la localidad de Totalán (Málaga).
El presunto delito por el que se denuncia al poeta segoviano está tipificado en el artículo 173 del Código Penal y se castiga con una pena de cárcel que oscila entre los seis meses y dos años a la persona que "infligiera a otra persona un trato degradante, menoscabando gravemente su integridad moral".
Las redes sociales son un arma de doble filo, si bien pueden ser utilizadas para enviar mensajes de apoyo, condolencias o afecto también para todo lo contrario. Cuando se conoció la noticia de que un niño de dos años había caído dentro de un pozo en Totalán el pasado mes de enero las distintas redes sociales se llenaron de innumerables mensajes de todo tipo. Bulos, desmentidos con presteza por la Policía y Guardia Civil encargada del rescate, mensajes positivos y de ánimo, pero también algunos considerados "ofensivos" por la Justicia. Este último fue el caso de los tuits publicado por el poeta Camilo de Ory.
Según ha informado la Fiscalía, el imputado comenzó a publicar mensajes refiriéndose al caso de Totalán el 20 de enero de 2019. Algunos de los tuit emitidos decían: "Si es molesto aguantar la obras del vecino, imaginad lo agobiado que tiene que estar Julen con las perforaciones", también "Julen, el espermatozoide de Dios". A estos le siguieron otros como: "Como has podido caer tan bajo, Julen", "el pozo lo ha hecho un hombre, ¿no? Pues violencia machista", "embutidos El Pozo patrocina este rescate", "nuevo nicho laboral: infógrafo del caso Julen. Trabajo garantizado hasta 2030" y "soluciones habitacionales Julen".
Uno de los tuits enviados por el poeta Camilo de Ory.
Por ello, el fiscal solicita contra Ory una pena de 18 meses de prisión, al entender que difundir los mensajes vía Twitter desde el 20 de enero y en plena operación de rescate del menor, tuvo una intención "claramente despreciativa hacia la dramática situación que estaba viviendo el menor y sus progenitores".
El pasado febrero, la abogada de los padres del niño presentó una serie de denuncias contra tuiteros y una página de internet "que se presenta como un medio de comunicación". Además, durante los trece días que duró el rescate del menor los progenitores ya avisaron de que trasladarían a la justicia los mensajes emitidos por quienes propagaran bulos o se mofasen del suceso en redes.
El juicio contra el poeta segoviano aún no tiene fecha y se celebrará en un Juzgado de lo Penal en la Comunidad de Madrid. A la pena de 18 meses de prisión se le añade la inhabilitación de utilizar las redes sociales durante el tiempo de la condena.
En declaraciones recogidas por El Español, el poeta segoviano aseguraba que lleva años "jugando con el humor negro y que jamás había tenido problemas con sus limites", por eso defiende su derecho a publicar los tuits. "Reivindico y creo que se puede trivializar con todo. El humor no tiene límites, pero mi pretensión no era ofender a esos padres sino hiperbolizar el circo mediático que se había montado en torno al caso de ese niño. Durante esos días recibí cientos, incluso miles, de mensajes amenazantes, alguno hasta de muerte", afirmaba de Ory.
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