La Generalitat de Cataluña ha multado con 30.000 euros a la compañía aérea Vueling por imponer un código de vestimenta y estilismo mucho más estricto para las azafatas que para sus compañeros varones. Según han denunciado, a las mujeres se les obliga a ir maquilladas con una base de su tono de piel y a llevar tacones de entre 5 y 8 centímetros, mientras que a los hombres simplemente les piden presentar "un aspecto limpio y arreglado".
Por este motivo tanto la Inspección de Trabajo como el sindicato de tripulantes de cabina Stavla han calificado de discriminatorios los criterios estéticos que la aerolínea exige a sus trabajadores, de modo que les han pedido "trabajar por una imagen corporativa de manera menos onerosa y más equilibrada, sin afectar a los derechos fundamentales de los trabajadores".
La compañía está en disposición de presentar alegaciones respecto a esta multa, algo que, como recoge Antena 3, están estudiando. Además, sus responsables han querido hacer público que están revisando su guía de estilo para hacerla más inclusiva, asegurando que "siempre recogemos las preocupaciones de nuestros colectivos y analizamos conjuntamente su implementación".
Del mismo modo recuerdan que han ido incorporando progresivamente algunas de las sugerencias de los tripulantes. "Un ejemplo de ello es la revisión de la guía en referencia al uso de maquillaje, en la cual actualmente no existe distinción de género ni obligatoriedad alguna", concluyen.
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