Parece que Andalucía vive su particular día de la marmota. En apenas 50 días será la tercera vez que los andaluces acudan a las urnas en trece meses. Y parece que el tiempo no avanza porque los temas de debates siguen siendo lo mismo. La situación del Parque Nacional de Doñana vuelve a situarse en el centro de la campaña una vez más. Hasta ahora, a la izquierda no le ha dado resultado el rechazo a la ley de regadíos propuesta por PP y Vox. De hecho, los populares han logrado por primera vez la Diputación de Huelva.
Desde Alemania, varios diputados habían decidido viajar hasta el epicentro de la polémica para comprobar de primera mano la situación que atraviesa Doñana. Sin embargo, este lunes han cancelado la visita. El motivo no es otro que la convocatoria electoral. En aras de ese respeto y "en vista de la gran importancia política que los temas del viaje han adquirido en los últimos días de cara a las próximas elecciones nacionales españolas", la Comisión parlamentaria "ha decidido renunciar por el momento a su viaje a Andalucía largamente planeado".
La norma registrada por PP, Vox y Ciudadanos en 2022 y por PP y Vox en 2023 ha provocado una importante polémica por la situación de sequía que vive Doñana. Las alarmas han llegado a la Unión Europea y a la propia Unesco, que han mostrado en varias ocasiones su rechazo. El PP, incluso, decidió paralizar la tramitación de la ley durante la campaña de las municipales. No obstante, una vez superados los comicios, la reactivó.
La polémica, pese a ello, no ha cesado. La decisión de los populares de no incluir en un primer momento a Miguel Delibes, presidente del Consejo de Participación de Doñana, entre los comparecientes provocó de nuevo una indignación que, por algunos días, parecía haber desaparecido. El PP terminó rectificando.
A esto hay que sumarle que el prestigio de los frutos rojos de Huelva se está viendo afectado por la norma y todo lo que la rodea. En Alemania, la plataforma Compact ha comenzado una recogida de firmas para pedir a los supermercados que no compren fresas provenientes de Doñana y de esta forma presionar a PP y Vox. Lidl y Aldi ya han señalado que están muy atentos a la evolución del conflicto. Por su parte, desde España se ha iniciado una contracampaña para boicotear a Aldi por su decisión.
La polémica está servida nuevamente y vuelve en vísperas de unas nuevas elecciones. Por ello, políticos de todo signo no paran de realizar acusaciones. Diputados alemanes habían decidido viajar esta semana a Doñana para ver la situación de primera mano. Sin embargo, la convocatoria de elecciones ha provocado la cancelación del viaje. Por este motivo, las reuniones entre los políticos alemanes y Sergio Arjona, viceconsejero de Sostenibilidad, en Sevilla y con el Director General de Espacios Naturales, José Enrique Borrallo, en la propia Doñana.
Mientras tanto, el Gobierno de España mantiene un perfil muy duro con Juanma Moreno y su Gobierno. La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se ha vuelto a pronunciar este lunes. Ribera ha pedido a la Junta que "deje de tontear y poner en riesgo a los regantes y agricultores españoles, a la reputación de España y obviamente, a Doñana".
La vicepresidenta se ha desvinculado de la visita de los alemanes al explicar que la iniciativa "sale directamente del Bundestag" en lo que parece ser una "costumbre" aunque por transparentes que sean estas visitas no forman parte "a la inversa" de lo que hace el Parlamento español en situaciones equivalentes.
Esta postura ha sido refrendada por Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno de España. "Desde el primer momento hemos manifestado nuestra preocupación y yo, sinceramente, lo venía venir; venía venir que este tipo de actuación irresponsable con una joya de nuestro patrimonio como es Doñana iba a tener una repercusión negativa sobre nuestra imagen, que indirectamente, va afectar a estos agricultores que tienen un alto prestigio en los mercados internacionales", ha señalado en TVE.
Por su parte, los defensores de la iniciativa mantienen que el boicot surgido en Alemania es responsabilidad del Gobierno de España. El portavoz del Gobierno andaluz y consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco, ha criticado este lunes el "uso" que el Gobierno central está haciendo de la visita de parlamentarios alemanes esta semana a Andalucía al ejercer como "altavoz del boicot" a la campaña de la fresa.
"Vamos a aclarar todo lo que tengamos que aclarar" o "es intolerable que el Gobierno auspicie esa campaña contra la fresa", han sido algunas de las frases que Fernández-Pacheco ha pronunciado en Canal Sur Radio.
Manuel Gavira, portavoz de Vox, ha sido aún más crítico al considerar que la visita que tenían prevista los diputados alemanes, "socialdemócratas y ecologistas", al Parque Nacional de Doñana forma parte de la campaña "contra la fresa de Huelva alentada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera".
En su opinión, "es deleznable este boicot a un sector puntero muy preocupado por el medio ambiente y que aprovecha al máximo los recursos hidráulicos de que dispone" y ha apuntado que sólo el diez por ciento de los frutos rojos se cultivan en el entorno del parque de Doñana y, de ellos, el más cercano se encuentra a 35 kilómetros de la reserva natural.
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