Una mujer de 43 años falleció en la tarde del pasado el lunes en la pedanía jerezana de Torrecera, Manoli, panadera, tras varias semanas con síntomas de coronavirus. Esto había generado inquietud, al presentarse la posibilidad de que estuviera pasando el Covid-19.
En la tarde del lunes falleció en su casa y horas más tarde fue encontrada por su marido a la vuelta del trabajo en la panadería, alrededor de la una de la madrugada. Tras dos pruebas de coronavirus y dos días a la espera de que se conocieran los resultados de las pruebas, no pudo ser despedida por sus familiares. Sin embargo, finalmente este jueves se ha conocido que la mujer ha dado negativo en las pruebas postmorten.
Así, la localidad de Torrecera llora a la mujer, muy querida y que había dejado de trabajar por encontrarse con síntomas. Todo apunta a una muerte súbita o algún episodio coronario. Una inciativa entre los vecinos quiere recordarla con flores en los balcones durante los próximos días, y que suene a la misma hora el Himno de la alegría. Es la forma que tiene el pueblo de despedirla toda vez que durante la pandemia no pueden producirse sepelios con afluencia de persona, incluso, evidentemente, cuando no hay síntomas de coronavirus. Por lo pronto, el domingo a las 12 de la mañana sonarán las campanas y se dará un aplauso de despedida a la mujer.
Torrecera está por el momento conteniendo la enfermedad. Según explica su alcalde, Francisco Javier Arcila, el pueblo se desinfecta tres veces en semana, los vecinos están incluso donando lejía y clorito para limpiar las calles y los puntos de mayor trasiego de gente, como tiendas de alimentación, se lavan con agua a presión y desinfectantes.
Este jueves, Arcila explicaba que estaban entregando las mascarillas facilitadas por Diputación para los vecinos, uno a uno, con el propio primer edil en esta labor. "Se está cumpliendo el confinamiento, todo el mundo está muy volcado", indicaba a lavozdelsur.es.
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