Este pasado miércoles recogíamos que la Junta de Andalucía había denegado el cambio de centro educativo a una niña de 11 años que lleva tres años sufriendo acoso escolar.
A pesar de la petición extraordinaria cursada por los padres para exigir un cambio de centro por "motivos de salud derivado de acoso escolar", desde Educación han mirado hacia otro lado y han rechazado este cambio de colegio que podría poner fin al infierno que lleva viviendo la menor en los últimos tres años.
Un día más en el infierno de tres años
Román Andrés, el padre de la chica, ha compartido hoy en sus redes –etiquetando a la consejera de Educación, María del Carmen Castillo– un vídeo desgarrador, de los que rompen en el alma, en el que se ve a la menor llorando de manera desconsolada.
Este es un día más, uno de los tantos que soportamos estos 3 años.
— Román Andres (@NazziconiRoman) May 22, 2025
Hace 3m le dijeron que había un grupo de WhatsApp para “hablar mal de ella”. El colegio minimizó, la inspectora también. No es un llanto más, es del alma. #stopbullying @SER_MarbellaCSo @MC_CastilloMena @EducaAnd pic.twitter.com/xRGS4r2sVn
"Este es un día más, uno de los tantos que soportamos estos tres años", ha relatado el progenitor, añadiendo que a su hija le contaron hace tres meses que había un grupo de WhatsApp formado por compañeros de la clase para "hablar mal de ella".
Las administraciones miran hacia otro lado
Por entonces, tanto el colegio como la inspectora minimizaron el daño y las consecuencias del sufrimiento que está soportando la niña. "No es un llanto más, es del alma", ha añadido Román.
En el referido vídeo se escucha a la chica llorando: "Ya estoy harta de que hablen mal de mí. En la clase estoy sola, ya no quiero ir más. No quiero. Llevo aguantando tres años, ya no quiero más". Ante los casos de violencia escolar, las respuestas siguen sin ser contundentes por parte de las instituciones y administraciones, que ni miran de frente al problema ni son capaces de encontrar soluciones para evitar el sufrimiento de cientos de menores que tienen que soportar a diario ser acosados, vejados y agredidos por iguales.








