Después de nueve días, el Nazareno de Santa María regreso a su templo tras cumplir con la histórica peregrinación extraordinaria que lo llevó a extramuros de Cádiz donde visitó parroquias y centros asistenciales. Si algo ha marcado estas intensas jornadas ha sido el masivo seguimiento que ha tenido por las calles del Cádiz extramuros, una zona de la ciudad que pisaba por primera vez esta secular imagen.
El Regidor Perpetuo de Cádiz ha reunido desde el 29 de agosto y hasta pasado sábado a hermanos y devotos en unas jornadas que ya forman parte de la historia de la propia hermandad y de la ciudad, teniendo en cuenta el arraigo devocional de Jesús dentro y fuera de la capital gaditana.


“Cariño y fervor en todos los barrios”
El hermano mayor de la hermandad, Jacinto Plaza, evalúa todo lo vivido y se queda con el “cariño y el fervor que todos los barrios y parroquias extramuros han regalado al Señor”. En declaraciones a lavozdelsur.es, Plaza subraya que han sido “días muy intensos y llenos de emociones junto a Jesús”.
No destaca ningún barrio y ninguna parroquia en concreto, “en todos ha sido especial, desde que salió por su barrio hasta la llegada a cada una de las iglesias extramuros como en San José donde vivimos una vigilia nocturna”.
Otro momento, al menos llamativo y pleno de emotividad, fue la entrada en el Hospital Puerta del Mar: “Hubo mucha emoción al ver a las madres que tenían sus recién nacidos hospitalizados, a los enfermos y a quienes pedían por las personas ingresadas”.


También guarda en su memoria lo que fue la llegada a Puertas de Tierra y al paseo marítimo “por donde nunca ha pasado; fue esplendoroso y especialmente cuando de regreso se giró la parihuela en Puertas de Tierra antes de entrar para despedir su visita a extramuros”.
Volverá a suceder “cuando Él quiera”
“Hemos aprovechado el Jubileo para llevar a cabo esta iniciativa totalmente extraordinaria, algo que ha sucedido porque Él ha querido y volverá a suceder cuando Él quiera”, expresa Jacinto Plaza, que deja en manos del Nazareno repetir esta experiencia u otra similar: “Saldrá de nuevo cuando el Señor lo quiera, aunque haya sido ahora en un año especial aprovechándolo para la peregrinación”.
No cabe duda que ha sido un hecho histórico nunca vivido en la secular historia de la cofradía, llamando la atención sobre el hecho de que los hermanos “han estado los nueve días acompañándolos por todos los lugares”. En definitiva, para el hermano mayor la renta que deja lo vivido “es la alegría que Jesús Nazareno ha llevado a los barrios y parroquias, con eso nos quedamos. Se ha llevado la esperanza a todos”.
Este evento singular se prolongó hasta el hasta el 6 de septiembre, enmarcado en el Año Jubilar de la Esperanza. Diferentes zonas de Cádiz, inéditas al paso de Jesús, han sido testigos de su llegada y testigos de todo, miles de personas.




