Setenil de las Bodegas está sufriendo una intensa lluvia que ha provocado grandes riadas en la tarde de hoy martes. La orografía del pueblo, conocida mundialmente por sus casas construidas bajo el tajo creado en la roca por el río en la parte baja de la ciudad, ha facilitado que esta tormenta esté arrasando con fuerza.
El alcalde de la localidad, Rafael Vargas, en conversación con lavozdelsur.es y visiblemente afectado, asegura que esta es "la mayor riada que ha visto nunca". En 2021 se produjo también una, pero al parecer, "como esta no ha visto nada igual", declara. "La riada se ha llevado calles por delante, ha arrastrado coches y ha destruido casas", explica. De momento no hay que lamentar heridos, pero sí que han tenido que sacar de sus casas a algunas personas mayores.
A las 16.50 horas de este martes el Servicio de Emergencias de Andalucía 112 recibía una primera llamada alertando de que el agua por las calles de Setenil de las Bodegas llevaba una altura de unos 15 centímetros.
Fuentes de la Guardia Civil, informan de que está cortada la carretera CA9119 a la altura del km 2 (la vía que va de Setenil a Alcalá del Valle) por deprendimientos causados por la lluvia. Tambien está cortada la A7276 en el km 13 (vía va de Alcala del Valle a Setenil en el término municipal de Setenil), por agua acumulada y barro con motivo de la intensidad de la lluvia. "Tenemos desplazadas en la zona a todas las patrullas disponibles que están prestando auxilio a la población", informan.
Según han indicado a Europa Press fuentes del Servicio de Emergencias 112, la CA-7276 y la CA-9119 se han visto afectadas por el agua y el barrio, estando la última de ellas cortada al tráfico en ambos sentidos. Además, son muchas las calles que se han visto afectadas por una riada de agua y barro.Así, desde calles como Reyes Católicos, Alcalá del Valle, Rosalía de Castro, Constitución o Cádiz se han emitido avisos sobre inundaciones en las viviendas y calles, además de coches arrastrados por los efectos de la propia riada. En el lugar se encuentran trabajando efectivos de Protección Civil, Policía Local o Guardia Civil, intentando controlar una situación que el propio alcalde ha calificado de "desastrosa".
En abril de 2021 el pueblo vivió una fuerte tromba de agua, en la que llegaron a caer hasta 52 litros de agua en un intervalo de sólo veinte minutos.
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