Una asistente al concierto de Morad en Torre del Mar : "Hasta puñaladas en un lugar donde había niños"

El rapero marroquí Morad se disponía a dar un concierto en la localidad malagueña de Torre del Mar, Málaga, uno de los más esperados por el público y que clausuraba las fiestas celebradas durante la Feria de Santiago y Santa Ana. Sin embargo, lo que iba a ser una velada soñada acabó siendo una pesadilla para los asistentes.

Claudia, una joven que acudió al concierto con su hermano, ha narrado el miedo que sintió en el concierto del joven cantante. Morad es un fenómeno de masas y mueve sobre todo a un público adolescente. A ello se le suma la gratuidad de evento, que hizo que el recinto sobrepasase la capacidad.

La joven y su familia acompañó a su hermano de 14 años a verlo, pero todo fue un “caos”: "Desde adolescentes drogados, hasta estampidas y puñaladas en un concierto donde había niños", recalca en sus redes sociales. “Había unas 10.000 personas aproximadamente y la gente, en vez de comportarse como humanos, decidieron subirse a los cables que sujetaban la carpa para ver al cantante mientras saltaban y bailaban, provocando que toda la carpa se moviera”, sigue explicando.

Asimismo, la joven cuenta que fue el propio Morad el que tuvo que parar el concierto varias veces, diciendo textualmente "vamos a hacer las cosas bien que aquí hay niños pequeños" y después les pidió a los jóvenes que estaban encima de la carpa que por favor se bajaran de ahí pero no le hicieron caso. “Incluso llegó a pedirle a la gente que hicieran un pasillo porque una chica se había desmayado y no podía salir, y la gente no dejaba pasar, les daba igual”, indica y añade que la joven “inconsciente” tardo siete minutos en salir sujetada por un grupo de personas.

Sin embargo, el verdadero miedo empezó cuando una hora después del concierto empezó una estampida de personas. “La gente hacia donde mi familia y yo nos encontrábamos. Apenas tuvimos tiempo de reaccionar, agarrarnos los unos a los otros y salir corriendo sin entender nada”.

“Todo el mundo empezó a correr, vi a muchas personas llorando. Mi hermano estaba en shock y nadie sabía que había pasado. Tras unos minutos nos dijeron que un joven había apuñalado a otros dos y también tiraron gas pimienta, de ahí la gran estampida”, narra e indica que en ese momento es cuando empezó a llegar la Policía.

La joven recuerda aterrada el suceso de ayer y añade que su hermano y ella llegaron a pasar tanto miedo y estrés que han tenido que acudir al médico al notar dolores de barriga derivado del trauma.