"Unos miserables y malnacidos nos han dejado un mensaje fascista en Puebla de Almoradiel, en Castilla-La Mancha. No les tenemos miedo y seguiremos defendiendo con todas las fuerzas una España feminista y ecologista", ha sido la reacción del coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, al ver su cartel electoral con Unidas Podemos rodeado de 16 conejos muertos en una plaza de susodicho pueblo de Toledo.
Una coalición entre Izquierda Unida y Ganemos gobierna actualmente en La Puebla de Almoradiel. El alcalde de este pueblo toledano, Alberto Tostado, ya ha informado a la Guardia Civil y la Junta Electoral de zona sobre estos hechos.
"Es muy triste que una imagen así pueda darse en nuestro pueblo. Es deleznable. Para nosotras no es una imagen que pueda pasarse por alto y condenamos y denunciamos esta acción desde el equipo de Unidas Almoradiel y la agrupación local de Izquierda Unida. Esperamos que sea denunciada por todos los partidos políticos de nuestro pueblo, no ponemos en duda que así será porque no es símbolo de alegría ni de salud para la buena convivencia de nuestro municipio. Por encima de las ideas y los colores está el amor a nuestro pueblo y nuestra gente, esa es nuestra bandera y es la que estamos ondeando, por eso no entendemos esta acción de odio con la matanza de 16 animales", ha afirmado en un comunicado la agrupación local de IU Puebla de Almoradiel, añadiendo: "La política se basa en el diálogo y el respeto, así la entendemos nosotras. Ese es el pueblo que queremos y estamos construyendo".
Miembros de otros partidos de la corporación han condenado este acto y se han solidarizado con Izquierda Unida, convirtiéndose tristemente en el tema de conversación del día en La Puebla de Almoradiel.
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