Las 'paguitas' a los 10 cotos de caza más grandes de España: reciben 6,2 millones de euros en tres años

El Partido Animalista Pacma elabora un estudio en el que detalla las cuantías recibidas por los empresarios y terratenientes que ostentan las propiedades de caza más afamadas del país

Un coto privado de caza de Andalucía.
Un coto privado de caza de Andalucía. MANU GARCÍA

España dedicó 6,2 millones de euros en tres años a la financiación de los cotos privados de caza más conocidos del país. Es la conclusión a la que llega el Partido Animalista Pacma tras elaborar un estudio dentro de su campaña contra la caza y el uso de recursos públicos para favorecerla. En concreto, Pacma señala que la Administración española destinó 6.237.609,41 euros entre los años 2019 y 2022.

La finca de Valdepuercas, en Cáceres, tiene 18.000 hectáreas, lo que la convierte en el coto de caza privado más grande de España. Pertenece al empresario siderúrgico José María Aristrain, y recibió, en cuatro años, un total de 51 subvenciones de la Dirección General de Política Agraria Comunitaria (PAC), la Dirección General de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Extremadura y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, por valor de 467.990 euros.

Mucho mayor es la subvención recibida por los hermanos Rafael y José María Finat que, en el mismo periodo de tiempo, recibieron 85 ayudas y subvenciones diferentes para el funcionamiento de su finca de caza El Castañar, ubicada en Toledo, hasta un total de 2.460.000 euros. En esta ocasión, el dinero manaba de las direcciones generales de Agricultura y Ganadería y de Políticas Medioambientales además del propio Ministerio de Agricultura.

Cuatro de las diez fincas de caza privadas más conocidas y aclamadas se encuentran en Castilla-La Mancha; segunda comunidad autónoma con mayor número de cotos de caza del país (5.814, solo superada por los 7.532 de Andalucía) y con un 87% de su territorio destinado a este fin, alberga, además de El Castañar, otras tres renombradas fincas como La Garganta, El Lobillo y El Castaño, en Ciudad Real., que oscilan entre las 9.600 y las 15.000 hectáreas, y todas ellas pertenecen a acaudalas familias de empresarios y aristócratas, en su mayoría españoles. 

La finca La Garganta, de 15.000 hectáreas y propiedad heredada del joven duque de Westminster, Hugh Grosvenor (uno de los hombres más ricos de Inglaterra), es uno de los lugares de caza favoritos de las casas reales europeas. Recibió, en cuatro años, más de 1.400.000 euros de los fondos públicos divididos en un total de 75 subvenciones entre las que destacan una de 169.500€ de la Dirección General de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Castilla La Mancha, y otra de 178.900 euros apenas un año más tarde.

Las fincas El Lobillo y El Castaño, propiedades de unas 10.000 hectáreas cada una y pertenecientes al empresario y terrateniente Juan Abelló y a la familia Botín respectivamente, recibieron, entre 2019 y 2022, 753.000 euros y 242.200 euros en un total de 81 subvenciones divididas entre ambas. 

En el estudio de Pacma también aparece el nombre de una de las familias ganaderas más acaudaladas de Andalucía: los Mora-Figueroa Domecq, conocidos principalmente por ser uno de los principales proveedores de toros para su uso en actividades taurinas en España. Son propietarios de la finca Las Lomas, de 12.000 hectáreas y ubicada en la provincia de Cádiz. Las ayudas públicas recibidas, en este caso, son significativamente inferiores a las anteriores: 102.000 euros provenientes, principalmente, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en los últimos 4 años.

El dueño de la Banca March y presidente de la Corporación Financiera Alba, Carlos March Delgado, es propietario de las 10.000 hectáreas que componen la Finca Los Altarejos, en Sevilla. A pesar de la fortuna que concentra el terrateniente, la administración española le concedió, en cuatro años, 38 ayudas y subvenciones por valor de más de 580.000 euros.

Por último, muy concurridas por célebres cazadores pero inferiores en número de hectáreas, se encuentran fincas como El Tochar (9.000 hectáreas), en Valencia; Los Alarcones (8.900 hectáreas), en Jaén, y La Azagala (7.000 hectáreas) en Cáceres, que recibieron, por orden, 85.600, 29.500 y 197.000 euros públicos solo entre 2019 y 2022. Esta última, La Azagala, es propiedad de Alfonso Álvarez de Toledo, marqués de Valdueza, y las otras dos, de los empresarios y terratenientes Jesús Franco y Samuel Flores. 

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