El progreso consiste en el cambio, dejó dicho Unamuno. Y este mes de agosto la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, ha cambiado una cosa que no ocurría desde hacía tres veranos: parar para tomarse una semana de minivacaciones, que han incluido el ya famoso fin de semana en Cambados junto a Alberto Núñez Feijóo.
Con Agustín Muñoz como alcalde accidental de Jerez en su breve e inédito impás veraniego, la dirigente popular está fuera del foco mediático, pero no descansando de sus quehaceres.
Desde esta perspectiva, como ha podido saber lavozdelsur.es, García-Pelayo piensa en cambios más o menos profundos en el seno de su ejecutivo local para afrontar la segunda parte del mandato, fuertemente marcada por las elecciones autonómicas de la próxima primavera, un posible adelanto de generales y un ciclo electoral que desembocará, en poco más de 20 meses, en las municipales de mayo de 2027.
José Ángel Aparicio, la excusa perfecta
La excusa perfecta para esta crisis de gobierno va a ser la salida del todavía delegado de Educación y Deportes, el ex director del IES Coloma, José Ángel Aparicio —solo pendiente de confirmación oficial— a la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta de Andalucía, donde ocupará el puesto que ha dejado vacante Isabel Paredes. Esta circunstancia provocará una serie de movimientos tectónicos en el equipo de gobierno jerezano que la alcaldesa pretende aprovechar para coger impulso y encarar mejor la fase decisiva del mandato.
De entrada, tendrá que reorganizar el reparto de delegaciones municipales con la entrada, en principio, de Tomás Sampalo como concejal que releve en el pleno a Aparicio, Apa, un responsable político que ha dejado mucha huella entre los miembros del equipo de gobierno. Parece que Sampalo, actual personal de confianza, muy conocido en el mundo de las cofradías jerezanas, asumiría la responsabilidad municipal de Deportes, pues ya colaboró con el propio Aparicio para pacificar la guerra entre los Xereces, pero está aún por ver.
Reorganización de funciones y competencias
Pero la reforma del ejecutivo tendrá mayor calado, como ha podido saber este periódico, y en esto está trabajando García-Pelayo, aunque haya frenado en seco su hiperactiva agenda institucional y orgánica. Delegados como Nela García Jarillo podrían ganar más responsabilidades en el renovado ejecutivo con el que se arranque el nuevo curso político, al tiempo que está por ver si se descarga de sus numerosas funciones a Jaime Espinar, superdelegado que es junto con Agustín Muñoz pies y manos de la regidora jerezana en los pasillos de Consistorio.
Otro asunto es Cultura y Fiestas, los actuales dominios de Paco Zurita. Aquí se tiene claro que todo lo que sale mal en Cultura y Fiestas mancha, por un lado, la decisiva candidatura de Jerez 2031 y, por otro, a un gobierno que pese a que puedan surgir conatos de incendio o pequeños incendios de pasto, no ha vivido hasta ahora mayor fuego que el de los autobuses urbanos. Y es precisamente este el que tiene más avanzada la solución a partir de finales de octubre, cuando la ciudadanía debe visualizar un giro radical en este servicio público esencial. No solo por los nuevos buses, sino también por un rediseño en las líneas.
En cualquier caso, cualquier polémica o bronca en este mandato no tiene parangón con lo sufrido en la etapa entre 2011 y 2015, y eso es algo que tanto la propia alcaldesa como sus delegados que vivieron aquellos años aciagos de crisis, recortes, impagos y recesión siguen teniendo muy presente a la hora de ponderar y medir la importancia relativa de las pequeñas crisis que van surgiendo.
El episodio de Fundarte y la pérdida de subvenciones ha sido calificado en los pasillos con esa expresión tan gráfica de "montamos un circo y nos crecen los enanos...", pero más allá de este asunto, grave, qué duda cabe, la alcaldesa tiene claro que el tramo que resta hasta la presentación oficial del bid book de la candidatura de Jerez 2031, Capital Europea de la Cultura, es prioritario y debe visualizarse con toda rotundidad en la gestión y en la proyección exterior de dicha candidatura.
¿Hasta qué nivel habrá cambios? Por mucho que la regidora popular, presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y senadora, haga gala de equipo unido —que lo está—, solo está en sus manos tomar estas decisiones y anunciar los cambios suficientes para que el mandato progrese hacia la renovación de una mayoría absoluta que en 2023 fue incontestable y que está por ver si se reedita dentro de poco más de 20 meses.
