CNT Jerez ha celebrado una concentración con el fin de denunciar la represión sindical que lleva a cabo la empresa y para apoyar a la afectada, quien recibió la carta de despedido cuando se encontraba de baja.
“Lizarrán explota y despide”. Así rezaba en la pancarta de la concentración convocada el pasado sábado, 17 de septiembre, en las inmediaciones del centro comercial y de ocio Área Sur. El acto comenzó a las 12:30 horas y tenía como fin protestar por el despido de una de sus empleadas de cuya supuesta irregularidad se hizo eco este medio. La joven trabajaba media jornada en el restaurante del centro comercial jerezano. Fue contratada para la campaña de Navidad con un contrato de obra y servicio. A finales de agosto recibió un burofax con su carta de despido, se encontraba en el cuarto mes de baja con depresión nerviosa, según ella, provocada por la presión a la que fue sometida tras pedir que se cumpliera el convenio de hostelería.
Con la concentración han querido hacer frente a la represión sindical en Lizarrán que según CNT están llevando a cabo. También han pedido la readmisión de la compañera despedida, delegada sindical de CNT en la empresa. En torno a una veintena de personas apoyaron a la afectado asistiendo a la concentración y pidieron “el boicot a Lizarrán y la solidaridad obrera”. Este martes 18 de octubre tendrá lugar el acto de conciliación en CMAC de Jerez.
La afectada pretende conseguir la nulidad del despido y afirma que sus problemas empezaron cuando comenzó a reclamar que se aplicara el convenio de hostelería. El franquiciado, por el contrario defiende que “no hay ningún tipo de conflicto”, que a la empleada le cumplió el contrato y que la empresa "la ha tratado siempre con el máximo respeto". Desde la CNT, “el jefe disfraza el despido como un fin de contrato, pero nosotros insistimos en que es delegada sindical y sería nulo”, ya que “la legislación laboral dice que un contrato en fraude de ley debe pasar a indefinido”, añaden.
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