En estado crítico. Así define la Coordinadora Andaluza de Mareas Blancas el estado del Hospital de Jerez. José Luis López, uno de los componentes de dicha plataforma y portavoz de Marea Blanca La Janda, ha denunciado públicamente la situación, señalando que en las urgencias hay pacientes que se llevan "cuatro días esperando cama para poder ser ingresado". Todo ello, como comenta, "por falta de enfermeras".
También López ha hecho referencia al problema de falta de material y ropa con el que se han encontrado muchos pacientes. "El despropósito no acaba con las urgencias. También falta ropa de cama para los pacientes, llegando a utilizar las fundas de las almohadas como toallas. Incluso para los ingresados y las UCI. Y muchos familiares ya traen la ropa de cama necesaria de sus casas". En este sentido, recientemente, el hijo de una paciente denunciaban que su madre estaba desnuda, tapada con una sábana, en la planta de Neurología al no haber camisones.
"Un plan perfectamente diseñado por Moreno Bonilla"
Para la Coordinadora Andaluza de Mareas Blancas las carencias en el hospital jerezano "no son un hecho aislado como no para de repetir la consejera Rocío Hernández. Es un plan perfectamente diseñado y ejecutado por Moreno Bonilla y su gobierno para seguir deteriorando la sanidad pública. Y así justificar la derivación de pacientes a la sanidad privada".
López entiende que ya no es suficiente con las denuncias que se presentan porque "la realidad de este hospital es nefasta día a día. Por eso es necesario que nos organicemos en los movimientos sociales como las Mareas Blancas. Y vayamos a denunciar con contundencia la situación de este hospital. Nos jugamos mucho".
El deterioro de las condiciones en el Hospital de Jerez está generando una gran preocupación entre profesionales sanitarios, pacientes y familiares. Desde Mareas Blancas insisten en que estas deficiencias no son puntuales ni consecuencia de una mala gestión puntual, sino que forman parte de un problema estructural que se ha ido agravando con el tiempo. Aseguran que los recortes en recursos humanos y materiales están afectando directamente a la atención sanitaria y piden una respuesta inmediata por parte de la administración andaluza para frenar lo que consideran un "colapso anunciado".







