Uno de los lectores de contadores que perdió su puesto tras hacerse Aqualia con el servicio del agua denuncia ahora que la empresa se ha valido de un "engaño" para ofrecerle unas condiciones laborales peor que la de sus otros tres compañeros, que finalmente han sido contratados.
"Esto ha sido una jugarreta de Aqualia". Juan Pedro Morales, uno de los lectores de contadores que perdió su puesto de trabajo tras hacerse Aqualia con el servicio del agua en Jerez, denuncia que la empresa "ha jugado" con él.
Si pasean por la calle Consistorio habrán visto en los últimos días como de los cuatro afectados que había reclamando su puesto a las puertas del Ayuntamiento ahora sólo está él, su mujer y su hija. Todo se debe a que hace dos semanas la empresa les ofrecía a todos la oportunidad de un contrato de un año y un plus de 350 euros siempre y cuando renunciaran a sus años de antigüedad en la empresa. En principio ninguno aceptó, aunque el caso de Juan Pedro era diferente al del resto de sus compañeros, ya que su antigüedad sólo era de tres años, no de hasta 30 como era el caso de los otros afectados.
Así, tras consultarlo con su abogada, tomó la decisión de aceptar. "Me quedaban sólo siete meses de paro, y aunque no era lo que tenía antes, por lo menos había conseguido algo". Tras firmar los papeles del preacuerdo, Juan Pedro conoció el pasado miércoles que Aqualia había citado a sus otros tres compañeros para proponerles un contrato indefinido, respetarles 17 años de antigüedad y un plus aún mayor que el que le habían ofrecido a él. Obviamente, todos aceptaron la propuesta.
"Mi abogada dice que en 25 años de profesión nunca ha visto algo así", denuncia Juan Pedro, que ahora no le queda más remedio que acudir a la via judicial para intentar solucionar un problema que desde Aqualia no ven así. "Desde Madrid nos dicen que las cosas son así y que en todo caso me indemnizan y listos, pero yo no estoy dispuesto a eso, yo quiero mi puesto de trabajo".
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