Cuando parecía que el llamado Plan de Igualdad para la Ciudadanía de Jerez 2025-2029 se iba a aprobar en pleno sin mayores problemas, con la previsible posición en contra de Vox, todo se empezó a torcer y acabó en bronca política.
"Los planes de Igualdad para la ciudadanía son el instrumento de planificación de las políticas públicas municipales que buscan la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres", defiende la teniente de alcaldesa Susana Sánchez Toro, responsable de Medio Rural, Igualdad y Diversidad.
El documento, que pasa su aprobación inicial con el apoyo del PP, PSOE y La Confluencia de IU y Ganemos —Vox vota en contra—, pretende "guiar la construcción de las políticas públicas con perspectiva de género a lo largo de los próximos años", en palabras de Sánchez Toro.
Tanto Ganemos, como parte de La Confluencia, como el PSOE, se alegran de la aprobación inicial de este Plan de Igualdad. A Ángeles Kika González, portavoz de Ganemos, le preocupa que las 64 medidas que incluye "no están calendarizadas, ni presupuestadas", y pide respuestas.
Ignacio Soto, concejal de Vox, se opone rotundamente al documento, porque el partido entiende que el Ayuntamiento utiliza este Plan de Igualdad "como herramienta de adoctrinamiento ideológico", que "enfrenta a hombres y mujeres y parte de una visión victimista".
Critica Vox que "se pretende convertir al Ayuntamiento en altavoz de la Agenda 2030, la Ley trans y otras iniciativas que dividen y polarizan a la sociedad. El Ayuntamiento debe ser neutral y no un actor político ideologizado". Carmen Collado, concejal del PSOE, insta a Sánchez Toro a responder a Vox, y amenaza con utilizar su respuesta en plenos como los de Valencia o Sevilla, donde el PP necesita al partido de Abascal para gobernar.
"A quien tenía que haber vigilado es a Koldo, Cerdán y Ábalos"
Collado también dice que los socialistas van a estar "vigilantes" para que se cumpla este Plan de Igualdad. A partir de ahí, el debate se empieza a enredar. Es la alcaldesa, María José García-Pelayo, la que contesta: "A quien tenía que haber vigilado es a Koldo, a Cerdán y a Ábalos; me comprometo a trasladar este Plan de Igualdad al señor Sánchez para que esté vigilante, y sobre todo para que lo traslade a todos sus compañeros".
La regidora remata su intervención: "Se les llena la boca de feminismo y luego son puteros", dice, en referencia a las informaciones que se están conociendo sobre las presuntas conductas de José Luis Ábalos y Santos Cerdán, ex secretarios de Organización del PSOE.
"Usted no estaría ahí si perteneciera a mi partido"
Las palabras de García-Pelayo provocan revuelo en las filas socialistas, que piden "respeto" al partido. En el siguiente punto, que aborda una propuesta de La Confluencia para que las solicitudes de indulto no impliquen la suspensión del ingreso en prisión de condenados por violencia de género, prosigue la bronca.
Es Carmen Collado, edil socialista, la que habla de la trama Gürtel para decirle a la alcaldesa: "Usted no estaría sentada ahí si perteneciera a mi partido, estaría inhabilitada desde que estuvo imputada por el caso Gürtel. En vez de echarla, la aforaron para protegerla. Duró tanto el proceso que terminó prescribiendo el caso. Es una corrupta prescrita".
María José García-Pelayo contesta: "No me va a callar. Tengo mi conciencia muy tranquila, fui investigada, nunca tuve un auto de procesamiento. Una vez finalizaron las investigaciones, se archivó por dos motivos: estaba prescrito y no se habían encontrado indicios de criminalidad". A esto también replica el edil socialista Jesús Alba: "Con la cabeza alta y con mucha dignidad, porque aquí el que la hace la paga, en su partido el que la hace no la paga.