Sucede sin pausa ni respiro desde hace casi 40 años. El recuento demográfico anual y oficial, a cargo del Instituto Nacional de Estadística (INE) siempre marca cada mes de diciembre una bajada en el número de residentes en la ciudad de Cádiz.
Es un titular fijo en estas fechas, como las ventas de lotería o el alumbrado navideño. El descenso es tan continuo que ha puesto la cifra de habitantes en apenas 110.000 personas cuando en la década de los 80 superaba los 150.000.
Es una tradición navideña indeseada y preocupante. Cada principio de invierno toca recontar el número de bajas en el censo local gaditano.
En este año 2025 que termina tampoco hay sorpresas, la única novedad es la llamativa insistencia de la evolución negativa, la cifra ronda la media de las dos últimas décadas: otros mil vecinos menos.
El resto de la provincia crece
De forma exacta, el censo anual que publicaba este lunes el INE fija la población de la ciudad en 110.123 a mes de enero de 2025. Esa cifra, en el mismo mes del año anterior era de 110.180 personas, por lo que la caída es de 1.057.
El retroceso poblacional de Cádiz vuelve a contrastar con la subida en todas las grandes ciudades de la provincia. Jerez, la más poblada, casi dobla ya a Cádiz con 215.025 habitantes.
Algeciras tiene 126.500 y Chiclana, San Fernando o El Puerto superan los 90.000, por lo que podrían adelantar a la capital de la provincia en población durante la próxima década si estas mismas tendencias se mantienen.
Al descenso de población se une el envejecimiento de la población. Un tercio de los residentes en Cádiz tienen más de 55 años. De hecho, la franja de residentes más cuantiosa es la que va de 60 a 65 años.
El número de alumbramientos sigue en caída libre. Los nacimientos descienden un año tras otro lo que provoca que la ciudad de Cádiz cuente en la actualidad con 2.536 vecinos 4 años, menos del 3% del total de la población.
Bruno García: "Nos jugamos 40 millones/año"
Las consecuencias administrativas, institucionales y presupuestarias que tendría bajar de los 100.000 habitantes en Cádiz, una cifra cada vez más cercana y que podría llegar en 2035 de mantenerse la tendencia actual, forman el aspecto más preocupante del constante descenso demográfico.
La pérdida de servicios, desde número de funcionarios de seguridad a sede de distintas empresas públicas, es el aspecto más preocupante de una caída que no parece tener fin. El alcalde de Cádiz, Bruno García, analizaba el impacto de esta situación en una entrevista a lavozdelsur.es: "Nos jugamos mucho en ese apartado. Los ayuntamientos se financian con unas transferencias que, por resumir, se dividen en dos categorías: municipios por encima de 100.000 habitantes y municipios por encima de 250.000. En función de esa población se les envía un dinero u otro. Cádiz está en la categoría de 250.000 por el acuerdo de singularidad que Teófila Martínez firmó con Hacienda en la época de Rato. Es decir, si seguimos perdiendo población, bajamos a la categoría de 100.000 y no por debajo. Aún así, el daño sería muy importante. Bajar de un bloque a otro nos supondría unos 40 millones de euros menos por año. El presupuesto municipal ronda los 190. Perder 40 supone más del 20% de ingresos menos".
Respecto a las posibles causas, el regidor encuentra "dos distintas: que algunos quieran vivir en Cádiz pero no puedan y el descenso de natalidad. Este último aspecto es nacional, internacional, es una tendencia que se va a seguir dando, lleva décadas". Para la primera motivación, Bruno García tiene una solución principal: "Construir vivienda, vivienda y más vivienda".
