La Audiencia de Cádiz describe el terror por el un vecino de la provincia de Cádiz y su familia que tuvieron que pasar durante meses tras facilitar una lancha para el narcotráfico a dos hermanos marroquís. El hombre fue torturado y amenazado con intensidad durante mucho tiempo hasta que la Policía consiguió desmontar la organización que le coaccionaba y a la que él mismo había ayudado en un principio.
Tal y como recoge La Voz de Cádiz, todo empezó cuando los dos hermanos A.E.B. y I.E.B., de 27 y 40 años llegaron a España y, con ayuda de los contactos en su país, construyeron una organización criminal dedicado al narcotráfico de hachís. Para ello le pidieron colaboración un hombre de la zona para que le facilitase una embarcación.
Con todo formado, los narcos empezaron con sus operaciones, hasta que en octubre del año pasado la lancha fue interceptada por la policía, que la requisó y condenó a lo pilotos que las llevaba. Sin embargo, de esta detención no fueron consciente los dos cabecillas de la organización, que cuando fueron de nuevo a buscar la embarcación para montar otro nuevo alijo no dieron con ella. La solución de estos delincuentes fue pagarlo con el vecino de la zona, quien le había dejado la lancha desde el primer momento.
El mismo medio narra como empezaron las amenazas constantes al vecino de Cádiz tras la incautación del barco. La sentencia recoge que fue “un clima de terror” permanente: lo llamaban por teléfono, se presentaban en su casa y lo amenazaban a punta de navaja a él y a su mujer y hasta le robaron el coche. El hombre tenía tanto miedo que dejó de salir e incluso de ir al trabajo.
La situación fue empeorando y días después volvieron a su domicilio con otra persona más y lo secuestraron- Lo llevaron aun apartamento en Manilva donde fue “vejado y coaccionado durante toda la noche, impidiendo que pudiera escapar”, mientras que lo amenazaban poniéndole una pistola en la cabeza o amagando en varias ocasiones con cortarle el cuello. Amenazaban con hacer daño a su pareja y con matarle: “Nos la vamos a follar delante de ti si no nos entregas tu casa” o “si no viene tu amigo vamos a cortarte el cuello”. Asimismo obligaron a la víctima a firmar un contrato de compraventa y reserva de la propiedad si bien nos les entregaba un dinero en un plazo que acordaron.
Tras esos meses de terror la organización fue desarticulada tras una investigación policial. Según la misma fuente, todos los procesados, los dos hermanos, el colaborador y el que terminó siendo su víctima, han reconocido ante la Fiscalía que dirigía esta investigación los hechos que se les imputa, llegando a un acuerdo de conformidad.
En consecuencia, el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Cádiz ha condenado a hermanos marroquís a ochos años y dos meses de prisión por los delitos de tráfico de drogas, extorsión continuada y secuestro. A cinco años, al colaborador; y a un año y dos meses, a la víctima al que se acusaba de un delito de tráfico de drogas. Asimismo, a los tres torturadores se le ha impuesto una orden de alejamiento.
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