Durante un servicio de verano, la Policía de un pueblo costero como Chipiona puede que vea muchas cosas. Algunas tan surrealistas que si las cuentas no te creerían. La Policía Local de Chipiona ha contado una anécdota que asegura que es real y no tiene desperdicio.
“Nos llama un cliente desde la puerta de una discoteca que afirma que no le dejan entrar”, comienzan contando los agentes en sus redes sociales y agregan que, “preguntado por el motivo, el mismo requirente afirma indignado que no le dejan entrar por llevar la sustancia tipo polvo blanquecino que nos muestra”, refiriéndose a la cocaína.
Aseguran que en ese momento “la cara de los compañeros era un poema”. Pero no para ahí el asunto. “Le pedimos el DNI, nos lo entrega amablemente y nos pide además que le guardemos su material mientras intenta entrar nuevamente”, cuentan.
“Y efectivamente, el muchacho, tras recibir la negativa a entrar volvió a los compañeros y requirió amablemente que se le devolviese su bolsita con su polvo blanco”, escriben y afirman que en ese momento fue denunciado por tenencia de estupefacientes y se procedió envío de la sustancia al Instituto de Toxicología.
La Policía recuerda además a “los que no le hayan quedado claro” que “la tenencia y o consumo de estupefacientes en vía y establecimientos públicos está prohibida”.
Comentarios