Una nueva incidencia técnica y ya van... ha afectado hoy a la línea de AVE Madrid-Sevilla de Renfe. Ya el pasado viernes, casi una veintena de trenes se vieron afectados por los efectos colaterales de la interrupción del servicio de la referida línea de AVE a las 20.40 horas.
La compañía aseguró entonces que la avería quedó resuelta a las 21.12, pero varios pasajeros reportaron que habían estado parados más de una hora en plena vía como consecuencia de los retrasos que, en muchos casos, superaban los noventa minutos. A comienzos de semana, el lunes, la incidencia fue mayor debido a un supuesto sabotaje que provocó un auténtico caos ferroviario.
Tren detenido
Varios usuarios han preguntado a Renfe, algunos incluso con ironía, señalando que montarse en un tren de la compañía es hoy en día un "deporte de riesgo".
#Renfe otra vez parados Ave Madrid Sevilla. @oscar_puente_ me gusta la fruta
— Carol (@Carol17552425) May 11, 2025
Desde Renfe han indicado que “debido a una incidencia técnica, el tren Alta Velocidad 2120 se encuentra detenido. Estamos trabajando para solventar la incidencia con la mayor brevedad posible. Por favor, presten atención a las indicaciones del personal de Renfe”.
Grandes problemas en los últimos meses
La línea de alta velocidad que conecta Madrid y Sevilla, inaugurada en 1992 como emblema de modernidad ferroviaria, atraviesa uno de sus periodos más problemáticos. En los últimos meses, los retrasos se han multiplicado, generando molestias entre los pasajeros y encendiendo las alarmas sobre el mantenimiento y seguridad de la infraestructura.
Ha habido jornadas marcadas por fallos en el suministro eléctrico que han afectado a decenas de convoyes en plena operación, con retrasos que han superado las tres horas. En otros casos, los pasajeros han tenido que soportar temperaturas extremas debido a la pérdida del aire acondicionado durante el trayecto.
Los retrasos en la línea Madrid-Sevilla se han duplicado en el último año, afectando tanto a los trayectos de largo recorrido como a los servicios intermedios. Esta tendencia contrasta con la percepción histórica del AVE como un modelo de puntualidad dentro del transporte europeo.






