Efectivos de la Policía Local de Málaga han detenido a una mujer de 21 años como presunta autora de un delito de desobediencia a agentes de la autoridad. Al parecer, estaba realizando una pintada en una calle de la ciudad y cuando los agentes llegaron se negó a identificarse, insultándolos e increpándolos.
Los hechos tuvieron lugar hace unos días, sobre la medianoche, tras recibirse llamada telefónica en la Sala 092 en la que se informaba de que estaban realizando grafitis en calle La Argentinita. Una vez en el lugar, los policías locales pudieron percatarse de la presencia de dos mujeres que estaban realizando una pintada en la fachada a la altura del campo de fútbol de la U.D. La Unidad.
Así, decidieron separarse y acercarse a ellas cada uno por un lado a fin de interceptarlas y proceder a su identificación, tras lo cual las informaron de que estaban incumpliendo la limitación de la libertad de circulación de personas en horario nocturno recogida en el estado de alarma, aún vigente en el momento de los hechos, así como que iban a ser igualmente sancionadas por deslucimiento de bienes.
Una de ellas, de 25 años, hizo entrega de su DNI a los agentes, pudiendo ser plenamente identificada y propuesta para sanción. Sin embargo, la otra, de 21 años, no cesó de insultar e increpar a los agentes con frases tales como: "Estáis aquí para servir al pueblo, sois la servidumbre. Os voy a dar una mierda por tener uniforme y placa. Os creéis más que nadie", todo ello acompañado de insultos personales y otras palabras soeces, además de decir "que lo único que estaba haciendo era plasmar su arte".
Según ha informado la Policía Local de Málaga, tras veinte minutos en los que los agentes no cesaron de intentar calmarla y que atendiera a razones, lejos de deponer su actitud, en un momento dado, la joven manifestó a los agentes: "Venga chulos, llevadme detenida", tras ser informada de que debido a su continua negativa sería necesario trasladarla para proceder a su identificación.
Ante la rotunda negativa y la actitud hostil de la individua, los policías locales procedieron a su detención y traslado a dependencias policiales, para, posteriormente, ser puesta a disposición judicial. En la actuación, los agentes intervinieron un total de cinco botes de espray y uno más de pintura.
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