El incendio desatado hace cinco días en Castellón, que ya ha llegado hasta la provincia de Teruel, continúa descontrolado a causa del viento, que provoca que las llamas sean especialmente virulentas.
Debe servir como aviso a toda España sobre lo que está por llegar, ya que el cambio climático está beneficiando los incendios forestales, su propagación y el aumento de los meses críticos en los que mayor riesgo hay de que se produzcan.
En el caso de Andalucía, a partir de este lunes las temperaturas van a experimentar una nueva subida, llegando a situarse cerca de los 30 grados e incluso superándolos en algunas zonas. Son unos registros inusuales para esta época del año y un peligroso aliado para el fuego.
Por si fuera poco el calor viene acompañado de una terrible sequía. Hace ya casi un año que los embalses andaluces comenzaron a ver cómo sus reservas iban reduciéndose hasta quedarse casi al mínimo y ahora vuelve a repetirse la historia. Sin lluvias, los embalses andaluces se encuentran por debajo del 25% de su capacidad total y la sombra de los racionamientos en determinadas poblaciones vuelve a cernirse sobre los ciudadanos.
La ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, alertó sobre esta situación este sábado durante su visita a la provincia de Cádiz. la titular del Ministerio alertó de que el cambio climático estaba alargando y anticipando el verano mientras los suministros de aguas subterráneas siguen decreciendo, lo que hace al país "mucho más vulnerable".
Ribera ha comentado también que por quinto año consecutivo se registra sequía en España, algo que dificulta luchar contra los incendios forestales, "una de las amenazas más devastadoras que sufrimos".
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