Este sábado está previsto que miles de andaluces salgan a las calles. El motivo: reclamar mejoras en el Servicio Andaluz de Salud. Las listas de espera, los retrasos en la Atención Primaria y, sobre todo, las políticas del Gobierno del Partido Popular abriendo la puerta a privatizar este servicio con una polémica orden de tarifas han provocado que la sociedad civil se organice para salir a las calles.
Lo cierto es que tanto sindicatos como oposición ven una oportunidad para poner contra las cuerdas al Ejecutivo de Juanma Moreno. Aunque durante estos meses ha habido concentraciones en distintos puntos de Andalucía, la izquierda espera una respuesta masiva de la ciudadanía para la de este sábado. Con el calificativo de "manifestación histórica", se referían en el Parlamento a las diferentes concentraciones programadas.
Desde 2018, con el plan de fusiones hospitalarias del PSOE, no se produce una manifestación masiva en Andalucía. Este 25 de marzo no se espera llegar a los niveles de protesta que fueron fundamentales para que los socialistas perdieran el Gobierno de la Junta de Andalucía. Aun así, oposición y sindicatos han encontrado en la gestión sanitaria el talón de aquiles del Ejecutivo del Partido Popular.
Los populares llevan semana repitiendo que la inversión de la Junta es record en sanidad, que hay 30.000 trabajadores más que cuando llegaron al Gobierno, el número de infraestructuras sanitarias construidas e, incluso, que las acusaciones de la oposición son "mentiras" o "bulos" y que mucha gente irá a las manifestaciones "engañada". La última encuesta del Centro de Estudios Andaluces coloca la sanidad como el quinto problema para la ciudadanía. Poco antes llegó a estar en tercera posición con más de un 8%.
El origen
Nada ha frenado una bola que, desde que se decidió no mantener en plantilla a 8.000 sanitarios contratados durante la pandemia, no ha dejado de crecer. La indignación ha sufrido altibajos, pero nunca ha desaparecido. El Gobierno, después de algunos rodeos, se vio obligado a mantener a los 12.000 sanitarios restantes que habían sido contratado como refuerzo, aunque los sindicatos denunciaron en un sinfín de ocasiones que eran parte estructural de la plantilla.
A partir de ahí todo han sido 'tiras y aflojas'. Sobre todo en la Atención Primaria. A pesar de que la Junta defiende que la espera media para lograr cita es de tres días, los sindicatos lo desmienten. Muchos usuarios, incluso, comparten en las redes la dificultad para que los atiendan sus respectivos médicos.
El conflicto ha ido incrementándose. Sobre todo en la actual legislatura con la nueva consejera de Salud, Catalina García. La sintonía de García con los sectores sociales no es del todo satisfactoria. En el mes de enero, los médicos de Atención Primaria estuvieron a escasas horas de ir a una huelga indefinida.
Pocas horas antes de que comenzara el parón, el Servicio Andaluz de Salud llegó a un acuerdo con los facultativos en el que se comprometía a limitar la agenda de cada uno de ellos. Dos meses después, el acuerdo ha 'saltado por los aires' ante la denuncia del Sindicato Médico de incumplimientos por parte de la consejería. El pasado lunes, tras dos meses sin movilizaciones, la organización que mantiene mayor sintonía con la actual Junta, volvió a salir a la calle a protestar. El resto de sindicatos lo ha hecho cada jueves de forma ininterrumplida.
La orden con tarifas para la Atención Primaria, el detonante
La situación era conflictiva, pero hubo algo que provocó que no hubiera marcha atrás. En el mes de febrero salió a la luz la tramitación de una orden por parte de Salud que actualizaba las tarifas de los conciertos con centros privados. Esa orden tenía una novedad: incluía precios en la Atención Primaria, algo que no había sucedido hasta el momento. Además, también permitía a las empresas privadas utilizar instalaciones públicas.
El revuelo fue mayúsculo y la consejera tuvo que comparecer para explicarlo. Entre los argumentos, el más utilizado por la Junta de Andalucía es que tan sólo sería en caso de catástrofe, algo como una nueva pandemia. Sin embargo, un día después del debate, la consejera firmó la orden para aprobarla. No se supo hasta su publicación en el BOJA algunos días después.
Estas tarifas han sido el detonante para que este sábado se celebren manifestaciones por todo el territorio. La Junta ha intentado apagar el fuego con una rectificación que precisa (aunque no demasiado) los casos excepcionales.
El último movimiento de Moreno para frenar la indignación que existe ha sido la firma de un 'Pacto Social' con sindicatos y patronal para "blindar" la Atención Primaria con el 25% del presupuesto total de sanidad. Además, el acuerdo también prevé nuevas rectificaciones para que la Atención Primaria no se privatice.
No obstante, mientras Moreno llega a estos acuerdos, los sindicatos denuncian que la consejera de Salud mantiene bloqueda la mesa sectorial. Además, ante algunas críticas desde la izquierda por la foto, los sindicatos han reafirmado su compromiso con la participación en estas convocatorias. Al menos, hasta que la Junta de Andalucía no dé un paso más en estos compromisos con la retirada de la orden o la publicación de alguna norma con mayor jerarquía que la deje sin efecto.
A la situación de la Atención Primaria hay que sumarle la nueva polémica de los contratos a dedo con adjudicaciones a empresas privadas a través de un mecanismo ya derogado y que entró en vigor para contrataciones de emergencia durante la pandemia. La oposición agita esta cuestión como trasnferencias de la sanidad pública a la privada.
La Junta se defiende como puede
El portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, ha expresado este viernes el respeto de la Junta a las movilizaciones de los profesionales sanitarios, pero ha apuntado que no pueden permitir que este tipo de protestas se fundamente "en mentiras".
En declaraciones a los periodistas, ha indicado que "es absolutamente falso que la sanidad pública andaluza esté peor que hace cuatro años, sino todo lo contrario, está mucho mejor desde que llegó el Gobierno de Juanma Moreno".
Ha añadido que Andalucía cuenta con "la mejor sanidad pública de toda España y con Moreno al frente del Gobierno no se va a privatizar absolutamente nada". Ha recalcado que existe la mayor inversión en sanidad de la historia.
El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, también se ha pronunciado en términos similares. Según él, las movilizaciones en defensa de la sanidad pública previstas para este sábado en todas las capitales andaluzas se apoyan en "mentiras porque hablar de privatización en Andalucía es una gran falsedad", y "más claro no lo podemos decir, en Andalucía no va a haber privatizaciones en ningún caso en la sanidad pública".
El consejero de presidencia ha defendido que esta "es la época de la historia de Andalucía en la que hay más inversión en la sanidad pública y en la que hay más profesionales en la sanidad pública andaluza", y también es en la que "se están reduciendo más los conciertos sanitarios", de forma que "aquí el único que ha privatizado en Andalucía algo de la sanidad ha sido el PSOE", lo que, además, "nos está costando, por cierto, una deuda grande por culpa de la mala gestión de esa privatización".
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