Eran otros tiempos en los que las pausas y los silencios le ganaban la partida al ruido mediático. Tiempos en los que se fumaba incluso en la pequeña pantalla. Años de reflexiones profundas, de otra televisión, otro mundo que parece lejano. Décadas pasadas que dejaban momentos que en días como hoy tienen un peso extraordinario.
"Nunca se dejaron dominar por el miedo"
Finales de la década de los 90. Programa El perro verde de un loco de la colina llamado Jesús Quintero. Frente a él, cara a cara, un exguerrillero al que todavía le quedaban casi dos décadas para ser presidente de Uruguay. Un José Mujica, tristemente fallecido en la jornada de este pasado martes, que hablaba pausadamente sobre la vida, sobre los males de esta muerte, sobre la maldad y el sentido de la justicia.
La hija del primero de ellos, ha recordado ese histórico momento: "Y volvió el silencio. Mi padre, Jesús Quintero, entrevistó a Pepe Mujica en los 90. Dos locos cuerdos, que nunca se dejaron dominar por el miedo. Adiós, Pepe".
"¿Quiénes son los enemigos de la vida?", le pregunta el añorado comunicador al exguerrillero. La respuesta de Mujica: “Los miedos que llevamos adentro. Miedo a ser pobre, miedo a no tener, miedo a la incertidumbre. La acumulación genera miedos. Cultura del miedo. Miedo al miedo”.
"Pinochet debería haber muerto a balazos"
Nada más iniciar el singular espacio, Quintero cuestiona a Mujica sobre la falta de memoria de los pueblos: "El hombre es el bicho de menor memoria, el que es capaz de tropezar varias veces con la misma piedra y se cree muy inteligente y lo es relativamente, pero no tanto".
También habló el uruguayo del juez Garzón y de Pinochet. En 1998, el genocida chileno fue detenido en Londres por una orden de arresto internacional emitida por España por el referido juez. "Un exquisito juez deja pasar la fila de torturados delante de sus ojos no los ve y no lauda en las contradicciones de España y no ve cuánto asesino suelto camina por España. Y sale a ver los muchos que hay por otras partes. No lo entiendo a ese juececito".
"¿No me dirá que confía en Pinochet más que en Garzón?", le pregunta Quintero, a lo que Mujica responde: "El momento de justicia con Pinochet fue con Manuel Rodríguez. Pinochet debería haber muerto a balazos, como corresponde a un hombre de su talla. Filosóficamente, estoy contra la pena de la muerte y estaré siempre, pero tal vez haya una media docena de casos que se lo merecen. Este es uno”.
Tras esto, el inolvidable comunicador le cuestiona sobre por qué no le gusta el juez que detiene al dictador: "Porque no le quiero reconocer a ningún juez de carácter internacional que se entrometa. No quiero avalar antecedentes que mañana vendrán contra nosotros porque, inevitablemente, todo lo que se inventa en aquel mundo termina dándose vuelta. No puedo avalar. Sé que hubo un presidente narcotraficante, pero no puedo avalar que Estados Unidos haga una invasión en Panamá para llevarse a ese presidente".