San Zacarías fue uno de los doce profetas menores del Antiguo Testamento. Vivió aproximadamente en el siglo VI a. C., en tiempos del regreso del pueblo judío del exilio en Babilonia. Su nombre significa “Dios se acuerda”, y su misión profética se centró en alentar a Israel a reconstruir el Templo de Jerusalén, símbolo de la presencia divina en medio del pueblo.
Zacarías es recordado por su mensaje lleno de esperanza mesiánica, pues anunció la llegada de un rey humilde que entraría en Jerusalén montado en un asno, profecía que los cristianos reconocen cumplida en la entrada triunfal de Jesús el Domingo de Ramos.
Sus visiones e imágenes proféticas inspiraron al pueblo a mantener la fe y la confianza en la promesa de salvación. La tradición lo venera como un hombre de profunda espiritualidad, que supo transmitir la fidelidad de Dios incluso en tiempos de dificultad.
Otros santos y beatos del 6 de septiembre
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San Magno de Füssen, abad (siglo VIII)
Monje escocés que llevó la fe cristiana a tierras de Baviera. Fundó el monasterio de Füssen, que se convirtió en centro de evangelización en la región. -
San Eleuterio de Spoleto, mártir (siglo III)
Soldado romano convertido al cristianismo. Fue ejecutado durante la persecución de los emperadores Decio y Valeriano. -
San Cagnoaldo de Laon, obispo (siglo VII)
Discípulo de San Columbano, monje irlandés, y posteriormente obispo en Francia. Se distinguió por su vida austera y su entrega pastoral. -
San Félix de Pavía, mártir (siglo III)
Joven cristiano martirizado en la ciudad de Pavía por confesar su fe en Cristo. -
Beato Tomás Tsuji, mártir en Japón (siglo XVII)
Catequista laico que, durante la persecución contra los cristianos en Japón, fue ejecutado por mantenerse firme en su fe. -
Beato Bertrán de Garrigues, presbítero (siglo XIII)
Dominico francés, discípulo y colaborador cercano de Santo Domingo de Guzmán. Se distinguió por su vida de oración y su predicación fervorosa.