San Gregorio Magno, papa y doctor de la Iglesia, nació en Roma alrededor del año 540, pertenecía a una familia senatorial de gran prestigio. Su vida dio un giro cuando, dejando atrás los honores políticos, decidió abrazar la vida monástica y fundar monasterios, entregándose por completo a la oración y el servicio a Dios.
En el año 590 fue elegido Papa, cargo en el que se destacó por su cercanía al pueblo y su profunda espiritualidad. Durante su pontificado reformó la liturgia, impulsó las misiones evangelizadoras —particularmente en Inglaterra— y se ocupó con especial atención de los pobres y necesitados en tiempos de crisis y epidemias.
Es considerado Doctor de la Iglesia por la profundidad de sus escritos teológicos y pastorales, entre ellos los “Diálogos” y la “Regla Pastoral”, obras que marcaron la espiritualidad de la Edad Media. A San Gregorio se le atribuye también el desarrollo del canto gregoriano, símbolo de la oración litúrgica de la Iglesia. Falleció en el año 604 y su legado permanece como referencia de humildad, sabiduría y servicio.
Otros santos y beatos del día
- San Marino de Titano (s. IV): cantero de origen dálmata, venerado como fundador de la comunidad de San Marino, origen de la actual República homónima.
- San Remaclo de Stavelot († 673): obispo y misionero franco, abad de Stavelot y Malmedy, célebre por su labor evangelizadora en la región de las Ardenas.
- San Aristeo de Alejandría (s. IV): obispo egipcio recordado por su defensa de la fe en tiempos de persecución y herejías.
- San Mansueto de Toul († 375): obispo de origen italiano que llevó la fe cristiana a la región de Lorena, en Francia.
- San Sandalio de Córdoba († 851): mártir mozárabe que entregó su vida durante la persecución en tiempos de la dominación islámica.
- Beato Guala de Brescia († 1244): obispo dominico, hombre de paz y mediador en conflictos civiles y eclesiales.
- Beato Esteban Nehmé († 1938): religioso maronita libanés de la Orden Libanesa Maronita, recordado por su vida de oración, humildad y entrega.