No hay mal que por bien no venga. Tranquilidad. Aquellas personas que estén enfadadas o indignadas con nuestro presidente ya saben una cosa: está sentando un precedente maravilloso, una especie de jurisprudencia, si no le ocurre nada malo al final y, pensándolo bien, en tal caso también la sentaría. Pase lo que pase no hay que abandonar la posición para que el enemigo no la tome. La definición de la palabreja es: “conjunto de sentencias y demás resoluciones judiciales emitidas en un mismo sentido por los órganos judiciales de un ordenamiento jurídico determinado”.
A Sánchez lo acusan de habérselas apañado para, contra viento y marea, es decir, a base de sentencias y acciones que él estima legales, destrozar España o, al menos, dejarla en el camino de la autodestrucción y muy malita. Parece como si a esta zona planetaria a la que llamamos España le estuviera pasando como al famoso grafiti: “Dios ha muerto, Marx ha muerto y yo me estoy poniendo muy malito.” Los principios cristianos van muriendo con su Dios, Marx se avergonzaría de esta izquierda y los demás somos hijos del Prozac en sus versiones últimas. Eso sin olvidar la frase de Bismarck que me dicen que se ha hecho lo que llaman viral: "España es el país más fuerte del mundo: los españoles llevan siglos intentando destruirlo y no lo han conseguido".
¿A ver si va a echar el tocino y la morcilla?
Mientras la llamada fontanera del PSOE -que, en lugar de desatascar, atasca- o alguno de sus antiguos hombres de confianza no diga claramente que el jefe máximo estaba al tanto de todo y lo demuestren con otra conversación capturada por la UCO, el señor Sánchez podrá comer más tranquilo aún de lo que ahora come, sean las dos o las cinco en punto de la tarde, hora taurina antiguamente, cuando un toro mató a Ignacio Sánchez Mejías y Lorca lo inmortalizó.
Como aparezca un testimonio ya del todo indefendible (y veremos además si ha surgido con el rescate de Air Europa), a Sánchez le puede pasar como al niño de los garbanzos de la historia verídica de Paco Gandía: vomitará la comida desde los trompitos hasta el tocino y la morcilla. O no, siguiendo con su jurisprudencia le echará la culpa a Vox y a Franco.
Si la cosa se pone muy fea la UCO va a tener que dejar sus ordenadores para ir a Moncloa y hablar claro con el señor que la ocupa (¿o la okupa?) e invitarlo cortésmente a comer pan y agua. De lo contrario, aquí no ha pasado nada, bueno, que algunos se han salido de madre, padre y familia entera, pero eso qué más da en una sociedad como la actual tan dada a estimular el emprendimiento. Los precios suben misteriosamente y nadie les pide explicaciones a los responsables. La gasolina apenas baja y no han empapelado a nadie. Un alto cargo empresarial que ha dado mordidas a los mordedores ha sido cesado de su puesto en Acciona, etc., pero, ¿ya está? ¿ahí no hay responsables políticos agazapados en sus Moncloas? El señor Sánchez es el capo máximo, ¿entonces la familia Entrecanales, dueños de Acciona, no tiene responsabilidad alguna? Ay, el Poder, el Poder, la Moncloa pasa, los cabezas de turco de las empresas pasan, las Acciona quedan.
En España hemos tenido un Señor X cuando los GAL que sigue siendo un misterio con la diferencia de que en aquel caso terminó en la cárcel un ministro y un secretario de Estado. No pongamos fronteras a la providencia que lo de Koldo y Cía aún no ha concluido. Cuando las corrupciones del PP también hubo cárcel, aquella era otra generación menos egoísta que la actual que es sinvergüenza, débil y mediocre. Tenía la otra generación un egoísmo solidario especialmente consigo misma, pero he dicho “especialmente”, la generación actual de los Sánchez no es “especialmente”, es “todo exclusivamente para mí que no he comido y son las cinco”.
La generación que no sufrió
Me conozco yo a esta generación de “primero yo, después yo y luego yo”, la sufro en la universidad, servidor es yoísta y jodido pero no tengo tan mala leche y me dedico por encima de batallas a hacer lo que debo: investigar, estudiar, docencia y atención a mis alumnos nativos digitales. Esa generación pseudorreligiosa y débil conduce ahora muchos ámbitos en España. Es lista, pero no inteligente y menos sabia. Ni por supuesto revolucionaria. Domina por abajo, desde la violencia silenciosa propia del lacayo, desde las relaciones públicas, algo que no es nuevo pero sí de mayor significado. Ahora me centro en la teoría, si es necesario daré nombres, apellidos y pruebas, están haciendo bastante mal a la universidad pública.
Regresemos a lo que estamos deseando que acabe de una maldita vez. Por el momento, el nuevo Señor X no ha aparecido, al menos cuando escribo este artículo. El sospechoso don Pedro sigue una moral religiosa que no la seguía el PP de la financiación oculta. Aquel PP corrupto no estaba todo el puñetero día hablando de la fachosfera y de los bulos, de los fascistas que iban a pelar a rape a las mujeres y les iban a quebrar una pierna para que no se movieran de casa. En su caso -el del PP de Rajoy y antes- hubiera sido culpar día y noche a la España roja que quema iglesias y mata curas. La bipolarización llegó después, con una izquierda -que fue mi izquierda- que como no tiene alternativas reales y estructurales de izquierda le da por las superestructuras gringas woke.
En otros decenios hubo mangantes, pero no polarización o bipolarización, aún resonaban los vientos de la Transición que habrá sido muy negativa para ciertos pimpollos, el “Régimen del 78”, la definen algunos, pero el “Régimen del 78” fue protagonizado por señores que habían sufrido en la vida, no todos, cárcel, exilios, persecuciones y torturas, clandestinidad, más una guerra civil. ¿Dónde está el sufrimiento de los que largan del “Régimen del 78”? En la vida se aprende sufriendo, lo decía el Gran Wyoming cuando no se había entregado al PSOE: “se sufre, pero se aprende”.
La línea religiosa
¿Por qué Sánchez sigue una línea religiosa en su progresismo aparente? Porque todas las religiones se basan en que hay que luchar contra un Maligno y hay que entregar la vida, si hace falta, para no dar el brazo a torcer ante el Maligno. El Maligno es la excusa para darle un sentido a la vida, para esconderse de esa vida y para cubrir la falta de gallardía y autoestima. Los cristianos eran devorados por los leones, cuando en la película Ben-Hur los crucificaron acusados de haber quemado Roma y los estaban abrasando vivos les dio por cantar y Nerón no daba crédito, alucinaba. No sabía que el poder del débil es sufrir.
Sánchez lloriquea, adelgaza y se viste de agredido o de agresor todo por culpa del Maligno y para defender el Bien y él está dispuesto a ser el que venza o dé la vida por la Verdad (eso se desprende de sus palabras, pero no es cierto). De esta forma, nos está mostrando un camino a seguir, lo que se llama jurisprudencia, desde ahora en adelante cualquiera podrá hacer lo mismo, si llega el Maligno al poder dirá ésta es la mía y el progresismo no podrá replicar nada, aunque, a pesar de todo, lo hará y el populacho -siempre olvidadizo- lo aplaudirá.
Otra parte del populacho no es tan olvidadiza, sabe que los quioscos que tenía montados para ayudar presuntamente al vulnerable y a la independencia podrán volver a funcionar y de esa forma será posible seguir viviendo gracias al pobre, al explotado y a la libertad frente a la opresión española. Unos 20.000 millones de euros públicos los esperan para seguir con la sopa boba, viviendo de la piedad.
Al pobre y al explotado no se les dan puestos de trabajo creados por el progresismo, se les ofrece caridad y solidaridad, como esos progres del Frente de Liberación de Judea que en la película La vida de Brian llegaron hasta el pie de la cruz donde habían crucificado a Brian para solidarizarse con él, le leyeron un manifiesto, le cantaron “es un muchacho excelente” y se largaron a continuación ante la mirada de un Brian que no acababa de creerse aquello.
Haga usted lo que quiera, pero…
Cuando gane las elecciones Feijóo o quien corresponda, ya saben los vencedores: hagan ustedes lo que quieran con el dinero de los contribuyentes y con las instituciones del Estado; las empresas que lo deseen que contribuyan a la delincuencia, los guardias civiles que investiguen y pinchen teléfonos, si alguien mata al rey se le perdona y se le concede amnistía, si le ponen una bomba a la Macarena o a la Sagrada Familia como son cosas de fachas no pasa nada. Si se apaga la luz o se paran los trenes tranquilidad en las masas y guerra al egoísmo privado. Si sigue habiendo paro y miseria la culpa la tendrá exclusivamente el capitalismo salvaje del cual viven los que desean destruirlo. Si ganan los malos tienen patente de corso, la está instituyendo don Pedro y su partido, los defensores de la igualdad, por eso no les importará que el enemigo aplique sus ideas y hasta las imponga.
Nunca pasa nada en España y si pasa no ha pasado nada. La UE es una quejica de muy señor mío, se mete con el gobierno de España, pero no con el negocio bancario privado, al que sirve la banca pública europea. Y el diario The Times, que critica duramente a Sánchez, pertenece a la conservadora familia Murdoch, dueña de la Fox News TV en EEUU, que siempre apoya a los republicanos y en especial a Trump que es malo para la SER y para la COPE, anda, el Bien y el Mal unidos frente al Super Malo Malísimo.
La personalidad y la grandeza de España es que ni tiene personalidad ni tiene grandeza. Ni España ni los países que la componen. De ninguno brota el hombre o mujer alfa que tenga lo que hay que tener para romper la jurisprudencia fundada por el señor don Pedro Sánchez con su manual místico de resistencia.
Bueno, no nos precipitemos, al final veremos cómo en la película gana el atractivo muchacho y se queda con la muchacha forzuda y de buen ver, al cincuenta por ciento. ¿Qué muchacho y qué muchacha progresista-socialdemócrata? Sánchez, con trampas o sin ellas, tuvo bemoles, a ver dónde están sus compañeros que limpien, fijen y den esplendor al PSOE.
El plan es: primero, Feijóo, luego, a más largo plazo, nuestra Meloni. Pero esto no es Italia, convoquen elecciones, ganen las derechas por mayoría absoluta y los progresistas renacerán porque el Mal será el Mal hasta cuando estornude. Entonces sí que habrá motivo para la rebelión e incendiar de nuevo Barcelona, repleta Cataluña de las nuevas prebendas que le da Illa por orden de Sánchez quien a su vez obedece a Puigdemont. A ver cómo el Mal va a luchar contra quienes se lo han montado tan bien tan bien que son el Bien y han sentado cátedra de jurisprudencia.
A ver cómo va a conseguir el Mal ser el Bien si don Pedro ahora quiere el dinero de los cañones de la OTAN para mantequilla -venga ese Premio Nobel de la Paz para él- y además les da más manteca a los que están hartos de que España les robe. El mozo “tié salida pa tó”. Resiste como el fuerte aquel, El Álamo. Si le sale bien la jugada la jurisprudencia habrá llegado al Parnaso de las estrategias y de nuevo el Bien se habrá cargado al Mal que si venciera un decenio de estos ya sabe cómo comportarse.