El que fuera presidente del Sevilla, José María del Nido Benavente, ha sido insultado en la Feria de Sevilla por una persona que además ha grabado el momento en el que le suelta a unos improperios al empresario.
A pesar de lo desagradable del incidente, Del Nido padre ha mantenido el tipo y no ha entrado en la provocación."Del Nido, cabrón, puta de Nervión", fue el insulto que recibió el que se considera máximo accionista del club sevillista y que está en plena guerra desde hace años con su hijo, José María del Nido Carrasco, actual presidente del equipo que entrena Caparrós.
Carga contra su hijo y José Castro
Del Nido Benavente mostraba ayer su indignación por el rumbo a la deriva que sigue llevando el Sevilla FC: "El club está muy por encima de todos nosotros, y más todavía en situaciones como esta en la que nos encontramos actualmente. En las malas situaciones es cuando más necesidad hay de que los dirigentes representen a la entidad y den la cara en vez de esconderse como cobardes. Los tres consejeros delegados, entre sueldos, asesores, escoltas y gastos asociados, nos cuestan más de 100.000 euros semanales, más de 17 millones de las antiguas pesetas. Tienen sumida a la entidad en la más absoluta dejadez. Ni derbi chico, ni asistir a las peñas, ni ruedas de prensa, ni representar al club en Feria, etc".
Con ironía, el que fuera presidente del Sevilla ha señalado que "las funciones, que conozcamos, de los consejeros delegados son las siguientes: Liquidar entrenadores, aumentar la deuda de la entidad, asfixiar a la entidad con créditos comprometiendo nuestros ingresos futuros, despedir a decenas de empleados, esos que decía Carrasco –su hijo– que batían todos los récords del mundo, pasearse por los entrenamientos y que les hagan fotos, además de colocar a béticos en puestos de responsabilidad".
Para Del Nido Benaventes es "incomprensible ver cómo el capital mantiene en el poder a los verdugos del Sevilla FC. Ellos son igual de culpables que los actuales gestores. Esperemos que las familias Carrión, Alés y Guijarro echen a Carrasco y a Castro antes de que sea demasiado tarde y sigan ensuciando el apellido de sus familias. A todos ellos los he requerido en varias ocasiones para llegar a un entendimiento y volver a sacar a flote este barco llamado Sevilla FC, que se nos está hundiendo. Mi puerta sigue estando abierta para lo que se me necesite".
