El consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha dado luz verde en la mañana de este miércoles a la bonificación fiscal para el grupo inversor KKH y su megaproyecto en Altadis en Los Remedios. Estas obras (la primera fase comenzó en enero) implican un cambio definitivo para un entorno que se revalorizará, tanto directamente por la inversión de KKH en la antigua fábrica de tabacos, como indirectamente en el entorno del río y Los Remedios.
Este proyecto, como se sabe, implica un hotel de lujo, un edificio de oficinas, parking subterráneo o la rehabilitación del edificio El Cubo. Un proyecto al que el anterior gobierno municipal puso alfombra roja, y el actual lo ha mantenido. Prueba de ello es que el Ayuntamiento que hoy preside José Luis Sanz mantiene los acuerdos -no trasladados entonces al papel- del anterior ejecutivo socialista.
La razón es, digamos, de ciudad. Porque los gobiernos municipales de PP y PSOE consideran necesario rescatar este espacio, uno de los últimos reductos industriales en entorno urbano y casi céntrico. Y la clave está en ese 'casi'.
Porque KKH invertirá 15 millones en la mejora del entorno urbano, una inversión en espacios públicos. La mitad de ese dinero es para la pasarela peatonal sobre el río, que conectará los actuales terrenos de Altadis con el centro de Sevilla.
Ese puente se ubicará entre los de San Telmo y de Los Remedios. Prácticamente, ha sido condición sine qua non de KKH para afrontar el proyecto. Los terrenos donde se invertirá valen lo que valen porque conectan directamente con el centro a través de la nueva pasarela. Y tanto interés hay que directamente la pagan los inversores.
Esas inversiones privadas sobre bienes públicos implican también acerados más amplios, parques, el futuro Jardín de las Cigarreras, árboles en la calle e incluso hacerse cargo de la ampliación de la capacidad de redes de suministro. Incluso se cede la capilla a las Cigarreras. Estas cesiones se describen así: "Parcelas de vocación pública pertenecientes al recinto de la Fábrica objeto de cesión voluntaria, por encima de los deberes urbanísticos, virtud del Compromiso de Cesiones adoptado por KKH Property Investors en fecha 16 de febrero de 2022", estimadas en 10 millones de euros.
El Ayuntamiento de Sevilla calcula que la mejora en el entorno (15,5 millones), más cesión de parcelas al Ayuntamiento y la hermandad, en lo que redunda para Sevilla (12,6 millones), tiene un valor de 28,1 millones de euros.
A cambio, el pleno va a dar luz verde a una bonificación en el ICIO del 50%, el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras, de gestión municipal. En lugar de pagar los 3,6 millones de euros previstos, KKH pactó con el anterior gobierno municipal del PSOE una rebaja que dejaría la factura en 1,8 millones. El actual documento de dirección técnica, firmado por el actual gerente de Urbanismo nombrado por el PP, Fernando Vázquez, lo expone así: "La estimación del incentivo fiscal que otorgaría el Ayuntamiento vía bonificación del ICIO supondría un total aproximado de 1,81 M€ y el conjunto de obras de mejora en infraestructuras públicas y cesiones de parcelas y edificios importaría un total cercano a los 28,17 M€, por lo que se justifica sin duda, como se requiere en el decreto de incoación del expediente suscrito por el Sr. Gerente, que el incentivo fiscal resulta netamente inferior al beneficio público generado".
Todo tiene cobertura legal, según este documento interno del Ayuntamiento clave para el proyecto en Altadis. Pero la interventora de la Gerencia, si bien ofrece un preliminar visto bueno -recuerda que KKH debe acreditar las condiciones para la bonificación-, abre la puerta a una modificación legal. "En su caso, podría resultar necesaria la tramitación de la oportuna modificación de la Ordenanza fiscal reguladora. Cualquier incentivo fiscal requiere su previa regulación normativa, en virtud del principio de inderogabilidad singular de los reglamentos: a través de un acto administrativo no se puede derogar una Ordenanza/reglamento de carácter general".
Por todo ello, tanto PP como PSOE han dado su sí en los dos últimos gobiernos locales a una transformación que, vienen argumentando, rescata los terrenos de Altadis y a la vez mejora la conexión entre el centro y Los Remedios. Y eso implica pensar a largo plazo en una intervención que salve las distancias del paso del río. Algo así como se intentó hace 30 años con La Cartuja y los puentes de La Barqueta y del Alamillo, más la pasarela antes del Puente del Cachorro. Pero, esta vez, con un sentido más urbano. Para que Los Remedios sea, si no lo es ya, más centro de Sevilla.
Este miércoles, el delegado de Urbanismo, Juan de la Rosa, defendía así el proyecto: "La gran beneficiada de este incentivo va a ser la ciudad, ya que se duplica la inversión que la promotora realiza en el entorno con la obligación de ejecutar a cuenta del desarrollo urbanístico de la pasarela, el sombreado del Puente de los Remedios y San Telmo así como la reurbanización integral de Juan Sebastián el Cano que va a suponer una importante mejora para el Barrio de los Remedios. No solo en movilidad, sino también por la mejora paisajística y de recorridos peatonales así como la integración de todo el desarrollo urbanístico en Los Remedios".
"Es urbanismo a la carta"
El grupo Podemos-IU ha votado en contra del proyecto en el consejo, el único que ha mostrado su rechazo. Consideran el asunto "urbanismo a la carta", defiende Susana Hornillo, concejala del grupo. "Se cambian normas municipales para esta inversión", subraya. Habla del PGOU, por ejemplo, y lamenta la falta de consenso con los vecinos. "Nadie pedía esta pasarela", que se ubicará entre los dos puentes a apenas 800 metros de distancia entre ambos.
Ese rechazo tiene que ver con la posibilidad hoy cerrada de que en esos terrenos hubiera infraestructuras para el barrio, dotaciones "educativas, centro cívico, de mayores... 40.000 cosas que se podrían hacer, pero todo se destina a intereses privados. Se vende que es bueno para Sevilla, pero no, el proyecto es bueno para la empresa, y el día que obtenga sus beneficios, se marchará. Por eso construyen una pasarela a su medida, algo que va a afectar a la visión del río para siempre".
Achaca a este ayuntamiento del PP y al anterior "el tono en el que hablan, apasionado, una declaración de amor eterno" a KKH. "Ojalá tuvieran ese amor por las asociaciones vecinales que trabajan para mejorar la ciudad cada día, que luchan por un pulmón verde, ese anillo del que tanto tiempo se ha hablado, para mejorar la convivencia". Se lo achacan a ambos partidos, que han estado en el poder en los últimos años. "Escenifican discrepancias, pero a la hora de gobernar, coinciden plenamente. El primer paso para este pelotazo lo dio el PSOE".
Y ofrece una última reflexión. "No estamos de acuerdo con la bonificación. Se le va a perdonar dinero a una empresa que no lo necesita. Esos 1,8 millones bonificados podrían no perdonárselos e invertir en los barrios, que tantas veces dicen que no tienen fondos. Si de verdad quieren una colaboración con los inversores que beneficie a Sevilla, que se le cobren los impuestos que se le tengan que cobrar", remacha Hornillo.
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