La Guardia Civil de Cádiz ha intervenido más de 30 kilos de pepinos de mar que fueron capturados de forma ilícita en las aguas de la capital gaditana. El Seprona de la Guardia Civil observó a dos individuos que descargaban dos cubetas de holoturias, de forma furtiva, desde una embarcación carente de folio.
El patrón de la embarcación huyó de la zona, siendo identificado y denunciado a posteriori por los agentes. Se han formulado las correspondientes denuncias por marisqueo ilegal y obstaculizar la inspección, dirigida a la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta en Cádiz y a Capitanía Marítima por las presuntas infracciones cometidas por la embarcación. Los especímenes han sido devueltos a su hábitat natural al encontrarse aún con vida.
El operativo tuvo lugar la tarde del lunes 21 de agosto, cuando los guardias civiles del Servicio de Protección de la Naturaleza, Seprona, realizaban labores propias del servicio en la zona del poblado de Sancti Petri, pudiendo observar a dos individuos que descargaban desde una embarcación dos cubetas de considerable tamaño, así como neoprenos y elementos propios de la pesca o el marisqueo.
Los guardias civiles procedieron a identificarles, ya que entre otras cuestiones la embarcación carecía de folio, y por la actitud vigilante de los individuos podría tratarse de algún tipo de actividad ilícita.
Al percatarse de la presencia de los agentes actuantes, uno de los individuos huyó en la embarcación, siendo identificado sin género de dudas por los agentes. Tras interceptar a la otra persona y realizar una inspección de los elementos que portaban, pudieron comprobar que se trataba de holoturias pescadas de forma ilegal, por lo que al encontrase aún con vida, reclamaron el auxilio de una embarcación, para devolver las capturas al mar.
Como resultado de esta actuación, se ha procedido a la intervención de más de 30 kilos de pepinos de mar que fueron devueltos a su medio natural, con el apoyo de una zodiac de la zona, y se ha procedido a formular las correspondientes denuncias por las irregularidades que presentaba la embarcación utilizada por los furtivos.
El precio de los pepinos de mar supera los 100 euros el kilo, dependiendo de la variedad, siendo una especie protegida y cuyo marisqueo no está permitido libremente.