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El niño, que jugaba con unos compañeros en el patio, se enganchó con uno de los ganchos que en su día sujetaban la red. Tuvo que ser operado en Cádiz, donde se le practicó una microcirujía y se le pusieron seis puntos de sutura.

Las denuncias de los padres del colegio San José Obrero no son gratuitas. Lo dicen hechos como el ocurrido el pasado viernes a un alumno de 6 años al que han tenido que poner seis puntos de sutura en el pene tras desgarrárselo con un gancho de una de las porterías de fútbol del patio.

Según cuenta Sonia, madre del niño, su hijo estaba jugando con otros amigos mientras esperaban a que viniera el autobús escolar. Fue entonces cuando, al acercarse al palo de una de las porterías, se enganchó con uno de los ganchos que, alguna vez, sujetaban las redes de la vetusta portería. Tal fue la fuerza, que le atravesó el pantalón del chándal y los calzoncillos hasta llegar al pene. 

El niño fue trasladado al hospital de Jerez, donde se comprobó que la uretra no había sufrido daños, y de ahí al Puerta del Mar, de Cádiz, donde se le practicó una microcirujía. Cuatro días después del percance, Sonia señala que su hijo "está bien, lo que lleva mal son las curas, porque al ponerle betadine le molesta. Tampoco puede andar bien y hace pipí con miedo".

De momento, tanto ella como su marido están planteando emprender acciones legales contra la Junta y el Ayuntamiento, a los que acusan de no haber puesto soluciones a los problemas que presenta el centro desde hace años.

Como se recordará, los padres del San José Obrero han decidido realizar todos los jueves concentraciones a las puertas del colegio hasta que las dos administraciones no arreglen todas las carencias que presenta el centro escolar.

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Jorge Miró

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