Para decepción de las centenares de miles de personas que abarrotaban la aldea, el Rocío de este año no ha acabado de la forma más sobresaliente como todos esperaban. La rotura de los soportes de carga del paso obligó a suspender la procesión pasadas las seis de la mañana, como informó lavozdelsur.es. A la altura de la casa de Triana, se dirigió directamete a la ermita para ser colocada en el altar. Pocos minutos después, la hermandad Matriz informaba a las filiales de que podían acercase al termplo con su simpecado para presentarse ante la Blanca Paloma y cumplir así el protocolo anual de que la Virgen visita los simpecados de las 125 hermandades filiales, algo que no podía dejarse pasar de largo dado que han sido dos años sin que se produzca este encuentro.
No se estableció orden alguno para la entrada de las hermandades a la ermita, ni antiguedad ni el orden de visitas establecido en el recorrido de la procesión. Así que la de Jerez se puso en marcha sobre las nueve de la mañana; no fue hasta tres horas después cuando pudo acceder al interior del templo, eso sí, con un gran acompañamiento de rocieros jerezanos, muchos de los cuales esperaban ya en la calle Almonte, donde se encuentra la casa de Jerez, a la espera de la llegada del paso; como no pudo ser, todos se unieron a la junta de gobierno y al simpecado para esta excepcional forma de presentarse ante la Virgen del Rocío: en vez de ir Ella a las hermandades, fue al contrario.
Por este motivo será recordada esta romería, circunstancia que alguna vez se ha producido en la historia de las procesiones del Lunes de Pentecostés, como fue la rotura de un varal del paso, en el año 2011, que obligó a recogerla rapidamente. La hermandad jerezana iniciará el regreso a Jerez este martes desde las nueve de la mañana, pasando primero por la ermita y entrando después en Doñana. El tránsito hasta Jerez será de tres días. El Jueves entrará en la ciudad para rendir la romería en Santo Domingo, de donde partió el pasado miércoles.
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