La librería El Árbol de las Palabras echa el cierre tras 14 años en el centro de Jerez

Julia Gómez, que abrió la librería infantil y juvenil en plena crisis económica de 2008, pone fin al negocio para emprender nuevos proyectos profesionales: "Gracias por el apoyo. Hemos creado un espacio de amor a la lectura y a los valores que nos aporta"

Julia Gómez, propietaria de la librería El Árbol de las Palabras, en una entrevista de 2018 con lavozdelsur.es
Julia Gómez, propietaria de la librería El Árbol de las Palabras, en una entrevista de 2018 con lavozdelsur.es MANU GARCÍA
03 de marzo de 2022 a las 12:02h

Julia Gómez (Jerez, 1979) abrió El Árbol de las Palabras en plena crisis económica de 2008. "Aquí les damos su sitio. Muchas veces anulamos a los pequeños porque pensamos que son tontos, y no. Son niños, ellos necesitan su espacio y ser escuchados", decía a lavozdelsur.es en una entrevista realizada por este medio en 2018. La iniciativa, que ha dado durante catorce años voz a la literatura infantil y juvenil en la plaza de San Andrés del centro de la ciudad, pone punto final a su rumbo, tal y como ha comunicado su propietaria en redes sociales.

"El ciclo de vida del Árbol ha llegado a su fin ya que se me han planteado nuevos proyectos profesionales", expresa a través de Facebook, donde confiesa que el proceso de cierre no será algo "inminente", sino de carácter progresivo, por lo que ha bajado los precios de los libros a "precio de saldo" y ha puesto ofertas tanto en la tienda física como en la página web, desde donde hace v enta on line. 

Julia posa para lavozdelsur.es en la puerta de su librería, en 2018
Julia posa para lavozdelsur.es en la puerta de su librería, en 2018.   MANU GARCÍA

La librera también ha querido agradecer a sus clientes y amigos el crecimiento de la librería. "Gracias a vuestro apoyo y confianza hemos creado un espacio de amor a la lectura y a los valores que nos aporta", dice.

Julia, que estudió Historia del Arte en la Universidad de Sevilla, se apasionó de la literatura infantil a partir de trabajar en la librería infantil Rayuela, que dejó para volver a su ciudad natal y montar El Árbol de las Palabras. En aquel momento, se sinceraba, "algunos niños solo habían pisado las grandes superficies, no habían visto una librería en su vida". Los pequeños lamentarán su marcha.

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S. C.

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