El padre de Marcos Carribero, el niño de 12 años que ha pasado por más de 40 operaciones de corazón, reclama a la Junta de Andalucía descalzo, con un capuz, cadenas en los pies y una cruz, que subvencione una nueva intervención que necesita su hijo en Estados Unidos.
Con un capuz de color verde, descalzo, cadenas en los pies y una cruz al hombro. Así y todo, la mayor carga de Juan Carribero es saber que su hijo Marcos necesita otra nueva operación en Boston (EEUU) y que no tiene medios para mandarlo allí. Tanto él como su familia reclama a la Junta de Andalucía que subvencione la operación de Marcos, como hizo en su día el gobierno de Aragón con una niña que también necesitaba una intervención cardiaca en Estados Unidos.
Juan recuerda que Marcos ha pasado por más de cuarenta operaciones, muchas de las cuales se llevaron a cabo sin una garantía debido a la falta de tecnología avanzada. Ahora, años después de su operación, necesita una nueva intervención. "Marcos sigue dándonos sustos, hace dos semanas se desplomó. El cardiólogo dice que necesita otra intervención, nosotros ya sabíamos que cada cuatro años tiene que operarse", afirma Juan, que indica que el presupuesto que le han dado en Estados Unidos es de 60.000 euros sólo para valorarlo y hacerle un cateterismo. A partir de entonces ya les darían el presupuesto de la operación, que sin duda se iría por encima de los 100.000 euros.
"Nosotros necesitamos siempre ayuda y la Junta no nos la ofrece, ni nos paga sesiones ni rehabilitación, hace caso omiso".
Levantando una gran curiosidad e incluso la indignación de más de uno al ver su problema, Juan Carribero recorrió, entre los palcos, el trayecto que separa la plaza Aladro de la plaza de la Yerba, para protestar ante el grupo municipal socialista.
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