La tercera edición de las becas de formación profesional 'The job of my life', otorgadas por el Gobierno alemán, oferta 98 plazas, el triple que en las dos ocasiones anteriores.
Jerez, una ciudad rica en atractivos turísticos, gastronómicos y en desempleo lo que nubla el porvenir de su juventud casi obligada a buscarse las castañas donde sea. Es el caso de Tamara y Esteban, de 21 y 24 años respectivamente, una pareja jerezana que ha decidido construir su futuro laboral –un futuro, en definitiva– aunque tenga que ser lejos del país que les vio crecer. Son dos de los jóvenes que han asistido en la Sala Paúl a una charla informativa sobre la iniciativa The job of my life, becas para la formación profesional que otorga el Gobierno Alemán.
La chica hasta ahora solo ha trabajado en un quiosco de helados. Actualmente se prepara las pruebas de acceso para matricularse en un grado superior y estudia inglés en una academia. En Jerez, asegura, se le niega incluso la posibilidad de estudiar lo que realmente desea: auxiliar de enfermería. “Hay mucha gente en paro, todo el mundo estudia y no me han admitido estos dos últimos cursos”. Esteban realizó el grado medio de Informática y hasta ahora ha trabajado de forma esporádica ejerciendo como técnico y en otros sectores que nada tienen que ver con su formación, como en la construcción.
La Agencia de Empleo de Jerez colabora en la difusión de estas ayudas con la Agencia Intermediaria de Empleo en Alemania Avanza Ya y con las entidades alemanas que contribuyen al desarrollo de proyectos de formación en el marco de esta iniciativa puesta en marcha en 2012 por el Ministerio de Empleo de Alemania a raíz de una creciente demanda de personal.
La madre de Tamara les acompaña a la charla informativa para los jóvenes interesados en este programa. Admite que en Jerez no tienen posibilidades y que si encuentran trabajo, éste será precario, como el de su otra hija. Sin embargo, si por ella fuera, no los dejaría marchar al país germano “mientras pueda darles algo, un plato de comida y comprarle ropa”. “En Alemania –añade– también hay trabajo precario y aquí tienes la ventaja de que acabas y vuelves a casa, con tu familia”.
Aunque deben estudiar previamente el idioma y saben que van a aprender un oficio realizando prácticas a miles de kilómetros de su ciudad, intentan ver el lado positivo. “Aquí no tenemos futuro, buscamos nuevas oportunidades y, así al menos, aprenderemos el idioma”, afirma Tamara. Un amigo de la pareja forma parte de los 40 jóvenes de Jerez que actualmente se están beneficiando de esta beca que concede el Gobierno alemán, y otro acaba de volver de realizarlo, ya que esta iniciativa se puso en marcha por primera vez en 2012. “A ellos les ha ido bien y entonces vamos más tranquilos”, asegura la jerezana. En cualquier caso, en la charla advierten de que pueden abandonar el programa cuando lo deseen si lo consideran oportuno, ya que no existe ninguna vinculación económica.
The job of my life consiste en aprender un oficio en Alemania. Antes deben realizar un curso intensivo y gratuito de alemán en Jerez cuya duración ronda los cuatro meses con el fin de obtener el B1. Reciben 300 euros para los gastos del viaje y durante las prácticas, 818 euros mensuales. "El objetivo es que ellos puedan ver si les gusta la formación alemana y si todo marcha bien, posteriormente comienzan la formación profesional mientras continúan con las clases de alemán y les ayudan a encontrar vivienda”, explica Markus Maier, de la empresa Avanza Ya, encargado de ofrecer la charla. Maier subraya que son becas de formación y solo una vez finalizada la misma pueden optar a un empleo en el país y cobrar como personal cualificado. Este programa aporta un poco de luz a estos jerezanos que después de esos tres años podrían aspirar a ser contratados en este Alemania donde el salario mínimo es de 8,50 la hora, unos 1.473 euros al mes... El trabajo de sus vidas.
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