Las redes están que arden a causa de una iniciativa que se ha filtrado a través de unos videos y de un reportaje realizado por Canal Sur. Se trataba de una acción de promoción turística de la ciudad cuyos elementos principales son el caballo cartujano y el mismo templo pero con la presencia dentro de dos jinetes montando a dos caballos de esta estirpe. La idea es realzar una efemérides: la construcción de San Miguel en 1484, que coincide con el año en el que los monjes cartujos de Jerez iniciaron la crianza del caballo denominado desde entonces como cartujano.
Pese a la disparidad de opiniones que ha generado, la indignación de muchos parroquianos así como de fieles en general, además de las agrias criticas que ha recibido al párroco, Manuel Lozano, han ganado por goleada a los que no le dan importancia al asunto o la consideran una buena iniciativa. No obstante, llueve sobre mojado ya que este sacerdote tiene un peculiar forma de gestionar y entenderse con los colectivos de su parroquia, como la Hermandad del Santo Crucifijo, que ha recibido de él no pocas cortapisas a la hora de usar determinados espacios del templo para sus cultos así como las hechuras de los montajes.

Ante lo sucedido, el obispado ha reaccionado de forma contundente con un comunicado en el que se desmarca y desautoriza la iniciativa. Recuerda que cualquier acto que no sea de culto dentro de los templos debe ser autorizado por Bertemati y subraya que “de haberse solicitado, nunca se habría autorizado la entrada de caballos dentro del templo, sino que se habría invitado a realizar la grabación en el entorno exterior de la iglesia”.
El obispado convoca un acto de desagravio con el Santísimo expuesto en el Sagrario hasta el 14 de julio
En la misma nota, la Casa de la Iglesia reconoce que en el pasado, “algunas órdenes ecuestres pontificias recibieron el privilegio del Papa de que sus miembros pudieran montar a caballo dentro de algunas iglesias”, pero matiza que eso a día de hoy “carece de sentido” y considera que es “insuficiente que la grabación se haya hecho con algunas cautelas, como realizarla con las puertas cerradas, trasladar la reserva del Santísimo o haber querido mantener un silencio respetuoso”.
Ante la situación creada, el obispado hace suyo “el escándalo y malestar de muchos fieles que ven dañado el respeto debido a los espacios sagrados” y anuncia un “acto de desagravio invitando (…) a una adoración eucarística en la capilla del Sagrario, donde el Santísimo permanecerá expuesto dos horas antes de la Eucaristía, de 18 a 20 horas, todas las tardes hasta el próximo jueves 14 de julio”.
Informa que el comunicado, antes de emitirlo,“ha sido expuesto al párroco, quien ha reconocido no haber obrado correctamente y lamenta profundamente haber permitido unos hechos que han sido motivo de escándalo para tantas personas”. El sacerdote, por su parte, se justifica en una nota diciendo que fue el Ayuntamiento el que le propuso la idea: “aunar la belleza del caballo cartujano, único en el mundo, y la belleza de San Miguel”.
Cuenta en su descargo que durante la sesión fotográfica “irrumpe en el templo Canal Sur”, algo, al parecer, no previsto: “Se realizan movimientos con los caballos para su reportaje y uno de ellos va a tener lugar en la capilla del Sagrario, donde en ese momento no estaba la Reserva Eucarística”; advierte que no estaba previsto usar el interior de esa capilla en el trabajo fotográfico, dejando entrever que si se accedió a la misma con los caballos fue por la presencia de la televisión. Finalmente, el párroco “lamenta el escándalo provocado a los fieles y se pide sinceras disculpas”.
De otro lado, el Ayuntamiento de Jerez ha emitido un comunicado en el que aclara que no ha intervenido en la producción fotográfica en San Miguel. En la nota se señala que fue Jerez Film Office, oficina dependiente del Consistorio, la que "se limitó a poner en contacto a la Yeguada La Cartuja con San Miguel". En la nota de subraya que "el Ayuntamiento no tiene nada que ver con el contenido de esta producción", y que fue la Jerez Film Office la que se "limitó a poner en contacto a la institución ecuestre con los responsables del templo, en una gestión de mera intermediación". Para más detalle afirma que "este trabajo no corresponde a ninguna campaña municipal de promoción de la ciudad".


